El asesinato de Ernesto Vázquez Reyna, delegado de la Fiscalía General de la República (FGR) en Tamaulipas, ocurrido el lunes 4 de agosto en Reynosa, encendió las alarmas a nivel nacional por la violencia que persiste en la entidad. Ante esto, la presidenta Claudia Sheinbaum aseguró que su gobierno trabaja para esclarecer el crimen y castigar a los responsables.
Los hechos se registraron sobre el bulevar Hidalgo, cuando el funcionario viajaba en una camioneta blindada. Sujetos armados lanzaron una granada al vehículo, lo que provocó que se detuviera en medio de una densa cortina de humo. A pesar de que Vázquez logró descender del automóvil y alejarse, fue alcanzado por una camioneta de sus agresores, quienes le dispararon y lo asesinaron a plena luz del día.
Videos del ataque circularon ampliamente en redes sociales, mostrando la crudeza del atentado. La Fiscalía de Tamaulipas confirmó que se ha coordinado con la FGR para avanzar en las investigaciones, mientras que el gobernador Américo Villarreal condenó el crimen y manifestó su disposición para colaborar con las autoridades federales.
Desde Palacio Nacional, la presidenta Sheinbaum afirmó:
“El Gabinete de Seguridad, desde el primer momento, estuvo en contacto tanto con la Fiscalía del estado como con la FGR. Se está apoyando para hacer justicia en este caso”.
Aunque la mandataria dijo no haber hablado directamente con el gobernador de Tamaulipas, señaló que el secretario de Seguridad, Omar García Harfuch, sí ha mantenido comunicación constante.
Respecto a los responsables, Sheinbaum indicó que el Gabinete de Seguridad será quien informe sobre la posible participación de grupos criminales y su relación con el robo de hidrocarburos.
Mientras tanto, la reportera Rosalía Quintá reveló que no está confirmado si el delegado viajaba con escoltas, ya que en los videos se le ve solo. También reportó bloqueos, disparos, robo de vehículos y colocación de ponchallantas durante el resto del día en Reynosa, acciones que habrían sido realizadas para dificultar la captura de los agresores.
Las autoridades localizaron la camioneta usada en el asesinato en la colonia Jarachina, a nueve kilómetros del ataque.