La nueva unidad de dispersión de moscas estériles en Tampico ya comenzó a operar como parte de las acciones para evitar que el gusano barrenador avance hacia el norte del país. Con esta instalación, el Departamento de Agricultura de Estados Unidos busca reforzar la estrategia de contención de la plaga y mantenerla alejada de la frontera estadounidense.
El Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica) compartió imágenes de uno de los vuelos donde se liberaron moscas estériles, criadas en la Comisión Panamá–Estados Unidos para la Erradicación y Prevención del Gusano Barrenador del Ganado (COPEG). Estas moscas, al reproducirse con las silvestres, frenan el desarrollo de la plaga al no generar descendencia.
La secretaria de Agricultura de Estados Unidos, Brooke L. Rollins, destacó que esta unidad permitirá actuar con mayor rapidez y ajustar operaciones en el norte de México. Recordó que hace unos días sostuvo un encuentro con la Presidenta Claudia Sheinbaum y representantes del sector ganadero para revisar la estrategia conjunta.
El USDA informó que, aunque la mayor concentración de casos se mantiene en el sur de México, la dispersión aérea continúa para evitar que la plaga avance. También señaló que los dos casos detectados en Nuevo León a finales de septiembre y principios de octubre ya fueron controlados, pero se mantendrá el plan de liberar alrededor de 100 millones de moscas por semana para prevenir riesgos en la región fronteriza.
De acuerdo con Senasica, hasta el 8 de noviembre se registraban 808 casos activos en diez estados, encabezados por Chiapas, Veracruz, Oaxaca y Yucatán. También se reportan casos en Tabasco, Campeche, Quintana Roo, Puebla, Guerrero y Jalisco, lo que mantiene activa la vigilancia epidemiológica.
Las autoridades estadounidenses explicaron que las operaciones aéreas se han concentrado principalmente en el sur del país, lo que obligó a utilizar equipos terrestres en zonas más al norte. Señalaron que tanto la dispersión selectiva como la producción masiva de moscas estériles seguirán siendo fundamentales para contener el gusano barrenador durante la temporada invernal.
Rollins señaló que ambos países están afinando una revisión conjunta para asegurar que los protocolos se cumplan y que la protección del ganado siga siendo prioridad, pues el objetivo es mantener la plaga controlada y reducir su impacto en agricultores y ganaderos de la región.