La ciudad de Hong Kong ha vivido días de dolor y desconcierto mientras miles de personas salieron durante el luto oficial para dejar flores, velas y mensajes cerca del complejo Wang Fuk Court. La población exige que se aclaren las responsabilidades detrás de una tragedia que pudo haberse evitado y que ya es considerada la más mortal desde 1980.
Mientras continúan los homenajes, las autoridades también siguen con los trabajos de búsqueda dentro del complejo. La policía informó que ya se revisaron cinco de los ocho bloques del lugar, aunque admitieron que algunos restos humanos quedaron reducidos a cenizas, por lo que podría ser imposible recuperar a todas las personas desaparecidas.
El número de víctimas también sigue aumentando. Según la vocera policial Tsang Shuk-yin, hasta las 16:00 horas del lunes se tenían registradas 151 personas fallecidas, superando las 146 reportadas un día antes. La funcionaria señaló que no pueden descartar que la cifra suba.
Al mismo tiempo que avanzan los trabajos de rescate, la investigación por el incendio continúa señalando fallas serias de seguridad. Autoridades encontraron paneles de espuma de poliestireno —un material muy inflamable—, andamios de bambú por remodelaciones y redes exteriores sin certificación contra el fuego, elementos que habrían facilitado que las llamas se extendieran rápidamente. Eric Chan, representante del gobierno, señaló que 7 de 20 muestras tomadas en distintas partes del edificio no cumplían con los estándares antiincendios.
La policía anunció la detención de 13 personas relacionadas con las obras del complejo, entre ellos trabajadores y responsables de remodelaciones. Los detenidos, de entre 40 y 77 años, enfrentan acusaciones de homicidio involuntario, confirmó Chan Tung, jefe de seguridad de la policía.
A estas detenciones se suman tres casos por presunta sedición. Entre los arrestados se encuentra Miles Kwan, un estudiante de 24 años, acusado de repartir folletos donde cuestionaba la actuación del gobierno durante la tragedia. El jefe de seguridad, Chris Tang, aseguró que detectaron comentarios “inexactos” en internet que, según él, ponían en riesgo la seguridad nacional, aunque no dio más detalles por tratarse de un caso sensible. Kwan fue visto saliendo de la comisaría el lunes por la tarde sin dar declaraciones.
A nivel internacional también se han enviado mensajes de condolencia, mientras especialistas en seguridad estructural piden revisar con urgencia edificios que se encuentran en remodelación para evitar nuevas tragedias como la ocurrida en Tai Po.