La República Democrática del Congo (RDC) iniciará ahora un periodo de vigilancia reforzada de 90 días para asegurarse de que el virus no vuelve a aparecer. Durante los meses que duró esta emergencia sanitaria, más de 47 mil 500 personas fueron vacunadas como parte de la estrategia para frenar la propagación de la enfermedad.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) destacó que controlar el brote en apenas tres meses fue un logro importante, especialmente porque ocurrió en una zona rural de difícil acceso. Su director regional para África, Mohamed Janabi, reconoció el trabajo rápido de autoridades, personal médico y comunidades locales. También afirmó que el apoyo brindado deja infraestructura más fuerte, como acceso a agua potable y mejores sistemas de atención médica.
El fin del brote se declaró después de cumplir los 42 días necesarios sin nuevos contagios desde el alta del último paciente, período que equivale a dos ciclos completos de incubación del virus. Este criterio es el estándar internacional para dar por terminada una emergencia de ébola.
Las autoridades congolesas informaron que el brote dejó un total de 64 casos confirmados y 45 personas fallecidas. La emergencia afectó principalmente a Bulapé, en la provincia de Kasai, una región donde las carreteras y las telecomunicaciones son limitadas, lo que complicó el trabajo del personal de salud.
Durante la respuesta, la OMS envió más de cien especialistas al país y entregó más de 150 toneladas de suministros médicos para proteger al personal sanitario y atender a los pacientes. Por primera vez en un brote, se instaló un módulo especial para tratar enfermedades infecciosas con mayor seguridad, diseñado para reducir riesgos y mejorar la atención.
El anuncio oficial fue hecho por el ministro de Sanidad, Samuel Roger Kamba, quien confirmó que todos los indicadores muestran que la transmisión del virus quedó interrumpida. Recordó que esta zona del país ya había enfrentado brotes en el pasado, lo que ayudó a una reacción más rápida.
La OMS señaló que los sistemas reforzados permanecerán en funcionamiento más allá de esta emergencia y servirán para mejorar la respuesta ante otras enfermedades. Con este episodio, la RDC suma ya 16 brotes de ébola registrados en su historia.
