San Luis Potosí cerrará 2025 con una reducción notable en los casos de dengue, registrando casi cinco veces menos contagios que el año anterior, pese a que la entidad enfrentó meses de lluvias continuas e inundaciones severas, especialmente en la Huasteca, que normalmente elevan el riesgo epidemiológico.
El comportamiento contrasta con lo previsto, ya que las condiciones de humedad favorecen la proliferación del mosquito Aedes aegypti, transmisor del dengue.
El dengue es una enfermedad viral que provoca fiebre alta, dolor intenso en articulaciones y músculos, malestar general, náuseas y, en sus formas más graves, hemorragias y fallas orgánicas. El padecimiento se clasifica en tres categorías: dengue no grave, dengue con signos de alarma y dengue grave.
Cifras: caída significativa respecto a 2024
De acuerdo con el Sistema Especial de Vigilancia Epidemiológica de Dengue, al corte del 1 de diciembre de 2025, San Luis Potosí acumuló 2,924 casos sospechosos y 619 confirmados, sin defunciones.
En comparación, durante la semana 48 de 2024, la entidad registró 11,107 casos probables, de los cuales 2,842 fueron confirmados, además de dos fallecimientos, lo que evidencia la marcada disminución.
Comportamiento municipal
La distribución de contagios también muestra una tendencia a la baja.
- El Naranjo encabeza los registros con 70 casos de dengue no grave y nueve con signos de alarma o dengue grave.
- Cerritos contabiliza 15 casos no graves y 53 en las categorías de alarma y grave.
- Villa Juárez y Axtla presentan cifras menores, contribuyendo al comportamiento estatal favorable.
SLP, entre los estados con menor incidencia en el país
A nivel nacional, San Luis Potosí figura entre las entidades con menor incidencia de dengue en 2025, un dato que destaca al compararse con estados vecinos como Michoacán, Guanajuato y Jalisco, que se mantienen entre los de mayor circulación del virus junto con Veracruz.
Autoridades atribuyen el descenso a acciones preventivas
La Secretaría de Salud estatal señala que la disminución obedece a diversos factores, entre ellos campañas de prevención, control del vector, atención oportuna y una mayor participación ciudadana en la eliminación de criaderos.
Con ello, el estado cierra el año con un balance positivo frente a una enfermedad que históricamente ha representado un riesgo recurrente para la población.