La creatividad de la gastronomía callejera oaxaqueña volvió a robarse el reflector en redes sociales. Esta vez, no se trata de un restaurante ni de una franquicia internacional, sino de un antojito tradicional reinventado: el “Osito de Esquite”, una presentación que ha generado comparaciones directas con el popular vaso de osito de Starbucks.
El concepto surgió como una forma de diferenciar un producto clásico del comercio local, pero rápidamente se transformó en un fenómeno viral. El esquite, preparado con los ingredientes tradicionales, es servido dentro de un molde con forma de oso, lo que convierte un antojito callejero en una experiencia visual y altamente “instagrameable”.
La propuesta no tardó en llamar la atención de usuarios de TikTok e Instagram, quienes comenzaron a compartir videos del peculiar esquite, comparándolo con el codiciado vaso de osito de Starbucks, uno de los artículos más buscados de la marca durante los últimos años.
Un esquite con sabor y sello regional
Más allá de su presentación, el “osito de esquite” mantiene la esencia de la cocina oaxaqueña. Los clientes pueden acompañarlo con ingredientes típicos como tuétano, chapulines, crema, queso y una amplia variedad de salsas, desde las más suaves hasta las de alto nivel de picor.
Esta combinación de tradición y creatividad ha sido clave para su éxito, al ofrecer una experiencia que mezcla identidad local con una tendencia global.
El fenómeno del vaso de osito de Starbucks
El vaso de osito de Starbucks es un termo de cristal de edición limitada, generalmente lanzado durante temporadas festivas como Navidad. Su diseño, con forma de oso y un gorro como tapa, lo convirtió en un objeto de colección que suele agotarse rápidamente y alcanzar precios elevados en reventa.
Precisamente esta popularidad fue la que inspiró indirectamente al comercio oaxaqueño, que ahora presenta una versión completamente mexicanizada, pero accesible y con sabor local.
¿Dónde conseguir el osito de esquite?
El “Osito de Esquite” se vende en Elotes del Isma, un puesto ubicado en la capital de Oaxaca. El horario de atención es de 5:30 de la tarde a 10:00 de la noche, ideal para quienes buscan un antojo nocturno mientras recorren el centro histórico.
El costo es de 80 pesos, y debido a la alta demanda, se recomienda acudir con tiempo. Eso sí, hay que considerar que los miércoles el negocio no abre, por lo que es importante planear la visita.