Kurt Cobain, el último ‘rockstar’

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Hace 19 años, un 5 de abril de 1994, una escopeta en el paladar mandó a la posteridad al posiblemente último ‘rock star’, Kurt Cobain

Un martes 5 de abril de 1994 Kurt Cobain buscó otra vida detrás de una escopeta que apuntaba directo a su paladar. Tres días después, de hace 19 años, su cuerpo sería descubierto por un electricista  que se presentó, paradójicamente, a instalar un sistema de seguridad en su casa de Madrona, Seattle.

La Generación X necesitaba un mártir y ese era el líder de Nirvana, que fue encontrado con el rostro destrozado acompañado de un juego de computadora, unos peluches y varias cintas de casete, entre ellas In Utero ( 1993), el álbum póstumo de Nirvana que él quería titular casi con una profética declaración de intenciones: “I hate myself and want to die” (Me odio y quiero morir).

“Se ha ido para unirse con ese estúpido club”, declaró su madre, Wendy O’Connor, al enterarse de la noticia haciendo referencia a Jimi Hendrix, Janis Joplin, Jim Morrison y el resto de músicos jóvenes que pasaron a la posteridad por ingresar al llamado “Club de los 27”.

El comunicado de la oficina del forense decía lo siguiente: “La autopsia ha revelado que Cobain murió de una herida de escopeta en la cabeza; de momento todo indica que se trata de una lesión autoinfligida”.

El médico que realizó la autopsia, Nikolas Hartshorne, encontró tanta heroína en la sangre de Cobain que si la escopeta no hubiera funcionado, la heroína habría hecho el resto. Se estimó que la muerte tuvo lugar el 5 de abril, tres días antes que el electricista encontrara el cadáver, pero esto podía haber sucedido un día antes o después.

El Cobain niño que nunca superó la traumática separación de sus padres; el Cobain joven que sufría un dolor estomacal incurable; el Cobain amoroso padre de familia y además heroinómano, el Cobain esposo de una junkie, Courtney Love, que los fans responsabilizan directamente de su muerte; el Cobain estrella de rock atormentado, el Cobain mártir del grunge y vocero de una generación desencantada que tuvo en Nevermind su “Biblia musical” cumplió cabalmente, hace 19 años,  aquella frase que más que una declaración de principios bien podría haber sido un digno epitafio: “Es mejor quemarse que apagarse lentamente”.

Decálogo del vocero de la generación del desencanto

Estas son 10 de las frases más célebres e ingeniosas de Kurt Cobain, la voz de una generación desencantada.

“Prefiero que la gente me odie por ser quien soy a que me ame por lo que no soy”.

“Pienso que la juventud solo dura hasta los 27, a partir de ese momento junto a la juventud se va la vida también”.

“Necesito volver a sentirme algo drogado para sentir el entusiasmo que sentía de niño”.

“En mi espíritu soy gay, podría ser homosexual; pero no lo soy”.

“Si no hubiéramos armado este grupo, supongo que estaríamos haciendo lo que el resto de la gente hace en el sitio donde crecimos; talar árboles, beber, tener sexo, hablar de sexo y beber un poco más”.

“No culpo al típico punk rocker de 17 años que me llama vendido, pero verá que cuando crezca hay más cosas que vivir de su integridad punk”.

“A veces siento como si la gente quisiera que me muriera para que así se cumpliera la clásica historia del rock”.

“Nadie muere virgen… La vida nos jode a todos”

“Ellos se ríen de mí por ser diferente, yo me río de todos por ser iguales”.

“Es mejor quemarse que apagarse lentamente”.

Con información de: http://www.excelsior.com.mx/funcion/2013/04/04/892189?imagen=1#link-content

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