La comunidad religiosa del templo de San Juan de Guadalupe ha colocado una manta vinílica frente al lugar, invitando a los feligreses y a quienes pasen por allí a unirse en oración por la llegada de la lluvia a la ciudad capital. Esta iniciativa se presenta como un acto de fe ante la actual crisis hídrica que enfrenta la región.
La “Oración por la Lluvia” recita: “Dios y Padre nuestro. Señor del Cielo y de la Tierra. Tú eres para nosotros existencia, energía y vida. Tú has creado al ser humano a tu imagen y semejanza, para que con su trabajo colabore en tu creación”. Luego, hace un llamado a la compasión divina por aquellos que sufren los efectos de la sequía y ruega por la tan necesitada lluvia.
Esta oración, inspirada en la súplica del profeta Elías, pide que la lluvia caiga del cielo sobre la tierra árida, produciendo frutos y salvando tanto a seres humanos como a animales. Se espera que este acto de fe sea el catalizador de un milagro que llene las presas de la capital y alivie la escasez de agua.
Aunque se desconoce si otros templos han adoptado iniciativas similares, la comunidad religiosa confía en que la difusión de esta solicitud movilice a más personas a unirse en esta plegaria por la lluvia.