Hay más de un centenar en la mancha urbana San Luis Potosí-Soledad
La utilización de combustibles altamente contaminantes como madera, llantas, plásticos, incluso zapatos, por las más de 100 ladrilleras que trabajan en la capital del estado, provocan elevados índices de contaminación y éstos desencadenan problemas a la salud de los productores y a los habitantes de los alrededores, como cáncer en la piel, infecciones respiratorias y baja de rendimiento escolar en los menores de edad.
En la capital potosina son aproximadamente 350 familias que se dedican a esta actividad y en Soledad de Graciano Sánchez hay otras 300 más.
Debido a esta concentración de sustancias cancerígenas que se encuentran en el medio ambiente por el número de ladrilleras que operan en esa área de la ciudad, en las colonias Tercera Chicas y Tercera Grande son cientos de personas las que están en riesgo de padecer de diversos tipos de enfermedades, señaló el coordinador del Centro de Investigación Aplicada en Medio Ambiente y Salud del Centro de Ciencia y Tecnología de la UASLP, Fernando Díaz Barriga.
En tanto que la doctora Melisa Bocanegra Salazar, investigadora de la Facultad de Medicina de la Universidad Autónoma de San Luis Potosí, indicó que las emisiones de humo de las ladrilleras son cancerígenas, y se ha demostrado que causan daño neurológico.
Díaz Barriga explicó que se han realizado varios trabajos de investigación sobre las afectaciones a la salud, ya que al menos operan cien ladrilleras en ese lugar de la capital, trayendo consigo un riesgo de salud muy importante tanto para quienes habitan alrededor como para la Ciudad en general. El proyecto hornos de ladrillos con aceite reciclado aún no se concreta, ya que es costoso y no se tiene la tecnología para implementarlo.
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