Las autoridades textiles en Bangladesh ordenaron hoy el cierre temporal de al menos 100 fábricas del sector en el distrito industrial de Ashulia, cerca de Dacca, por las protestas de trabajadores que exigen aumentos salariales.
La decisión fue tomada por la Asociación de Manufactureros y Exportadores de Artículos de Punto (BGMEA) y afecta a decenas de miles de empleados, que no recibirán su sueldo durante el tiempo que se prolongue el cierre, informó a Efe una fuente del organismo.
La suspensión del salario en este tipo de situaciones está contemplada en la Ley Laboral del país asiático, según los medios locales.
“Durante los últimos días ha habido protestas violentas y se ha decidido cerrar los talleres de Ashulia hasta que la situación vuelva a la calma”, explicó la fuente, que prefirió conservar el anonimato.
En total, entre 100 y 150 fábricas pararán su producción al menos mañana, aunque el parón, de carácter indefinido, podría prolongarse más días.
La decisión llega pocas horas después de que el Gobierno de Bangladesh anunciara la creación de una comisión para estudiar la subida del salario mínimo de los trabajadores del textil.
Esta comisión, integrada por representantes gubernamentales, de las fábricas y líderes sindicales, hará una serie de recomendaciones en un plazo de tres meses, según explicó hoy a Efe Tarek Zahirul, portavoz del Ministerio de Textiles.
El aumento del salario mínimo entrará en vigor con efecto retroactivo desde el 1 de mayo.
La última vez que se subieron los sueldos en este sector fue en 2010, cuando el salario mínimo mensual era de 21 dólares, y actualmente ronda los 38 dólares, en el caso de los puestos de menor rango y peor pagados.
El Gobierno también ha aprobado un paquete de enmiendas a la Ley Laboral de 2006, que incluye el derecho a crear sindicatos sin el permiso de las fábricas o la obligatoriedad de un seguro médico y de vida para los trabajadores.
La reforma será introducida en el Parlamento nacional en un plazo de dos meses, según fuentes gubernamentales.
Bangladesh está conmocionado desde que el pasado 24 de abril se derrumbara un edificio de nueve plantas en las afueras de Dacca con cinco talleres textiles que producían para grandes marcas de Occidente.
Casi tres semanas después de la tragedia, que se ha cobrado la vida de al menos 1.127 personas y ha herido a 2.438, los servicios de rescate continúan cada día recuperando cadáveres entre las ruinas de la “zona cero”.
El Ejército ha liderado la operación de búsqueda de cuerpos y desescombro hasta ahora, aunque un portavoz de la institución aseguró hoy a la prensa que el control del operativo será transferido mañana a la administración local.
Al menos 100 fábricas textiles en Bangladesh cierran por protestas salariales]]>