La quema de cohetes y fuegos artificiales no solo ilumina el cielo durante las fiestas decembrinas, también deja consecuencias negativas para la salud y el entorno natural, advirtió la Agenda Ambiental de la Universidad Autónoma de San Luis Potosí (UASLP).
Isabel Lázaro Báez, responsable del área, señaló que estos artefactos contienen sustancias químicas que, al explotar, liberan residuos tóxicos y partículas contaminantes. Estos elementos se concentran en el aire y contribuyen a la formación de smog, lo que afecta principalmente a personas con enfermedades respiratorias y reduce la calidad del ambiente.
Otro de los efectos más visibles es el daño que provoca el ruido excesivo en los animales. La especialista explicó que las detonaciones generan estrés, desorientación e incluso lesiones en mascotas y fauna silvestre, una situación que se repite cada año durante las celebraciones tradicionales.
También alertó que el uso de pirotecnia representa un riesgo constante de accidentes, sobre todo en niñas y niños, quienes muchas veces manipulan estos productos sin conocer el peligro que implican, lo que puede derivar en quemaduras y otras lesiones graves.
Aunque reconoció que la pirotecnia forma parte de costumbres profundamente arraigadas, hizo un llamado a la ciudadanía a reflexionar sobre su impacto y a considerar opciones más seguras y responsables. Entre las alternativas, mencionó el uso de luces LED, que permiten mantener el ambiente festivo sin generar contaminación ni poner en riesgo la salud.
