En una reciente declaración, el presidente Andrés Manuel López Obrador reconoció la existencia de laboratorios de drogas, incluido el fentanilo, en México. Afirmó que su gobierno está tomando medidas para combatir este problema, incluyendo la destrucción de dichos laboratorios.
López Obrador destacó la correlación entre el aumento del consumo de drogas y los niveles de violencia en el país. Ante esto, instó a su sucesor en el cargo a lanzar una campaña intensiva contra el consumo de sustancias, compitiendo con el atractivo de plataformas como Netflix y las estrategias publicitarias de las drogas.
En su conferencia de prensa matutina, el presidente señaló que si bien México es un productor de fentanilo, también se produce en Estados Unidos y Canadá, por lo que instó a no atribuir toda la responsabilidad a México. Además, recomendó que se lleve a cabo una campaña de concientización dirigida a los jóvenes y a toda la población, destacando los daños asociados con el consumo de drogas y promoviendo valores que contrarresten su uso.
López Obrador sugirió que se priorice otra campaña sobre la mejora de la alimentación, reconociendo que la mala alimentación es una de las principales causas de muerte en el país, especialmente relacionada con enfermedades cardiovasculares y diabetes.