El presidente Andrés Manuel López Obrador ha hecho una comparación contundente al abordar la intención de sus opositores de cancelar las conferencias matutinas, equiparando esta medida con el retiro de concesiones a medios de comunicación que critican a su gobierno.
Durante su conferencia mañanera del jueves 11 de abril en Palacio Nacional, López Obrador destacó que la cancelación de estas sesiones sería una violación a la Constitución, un intento de silenciar su voz y una limitación al ejercicio de su derecho de réplica. Para ilustrar su punto, mencionó la posibilidad de cancelar programas de medios como Radio Fórmula, Azteca, Televisa y Reforma, enfatizando que no permitirá que esto suceda.
El presidente insistió en que cancelar estas conferencias sería un acto contrario a los principios democráticos y una amenaza al derecho a la información en México. Se cuestionó sobre el paradero de la democracia y la transparencia, destacando que el intento de silenciar al gobierno es un extremo que revela la actitud de los conservadores en el país.
En un tono desafiante, López Obrador señaló que vivimos en tiempos interesantes, donde la idea de callar al presidente se ha convertido en una realidad. Este posicionamiento refleja su firme compromiso con la continuidad de las conferencias mañaneras como un espacio crucial para la transparencia y el diálogo democrático en México.