El presidente Andrés Manuel López Obrador indicó en la Mañanera que el actual gobernador de Morelos, Cuauhtémoc Blanco Bravo, es una persona de toda su confianza tras las acusaciones en su contra que lo señalan de un presunto enriquecimiento ilícito.
En el Salón Tesorería de Palacio Nacional, el mandatario federal aseguró que detrás de los señalamientos en contra de Blanco Bravo hay politiquería, y acusó que en Morelos había una asociación que era alimentada mutuamente entre el poder político y la delincuencia organizada.
“Lo que hay detrás es para decirlo amablemente, sutilmente, es politiquería. Es que en Morelos había una asociación delictuosa, se alimentaba y se nutrían mutuamente (entre) el poder político y la delincuencia, entonces la traen en contra de Cuauhtémoc Blanco y no dejan de atacar. Pero yo lo apoyo”.
López Obrador señaló que el ex seleccionado nacional de futbol y actual gobernante de la entidad, enfrenta una herencia de administraciones pasadas que modificaron las leyes para que prácticamente esté atado en el Congreso local.
“Tiene a gente que le heredaron, hicieron leyes antes de que saliera el gobierno anterior, de tal forma que lo dejaron atado en el Congreso”, aseguró el mandatario.
El mandatario federal indicó que la acusación en contra de Cuauhtémoc Blanco fue realizada por parte de un fiscal, quien aseveró, fue puesto por el gobierno anterior. En ese sentido, López Obrador recalcó que en la entidad, mantienen la práctica hecha por los gobiernos neoliberales de mantener por varios años a funcionarios en cargos clave.
“Una de las cosa que hicieron es que dejaban cargos por 10 o 15 años en el periodo neoliberal y no se puede mover a un fiscal estatal. No solo eso, como burla también entre 10 y 15 años para los fiscales anticorrupción, que pueden ir por los gobernadores”, detalló AMLO.
Por lo anterior, el titular del Ejecutivo Federal fue enfático al decir que durante el largo periodo en los cargos de los fiscales, se ven los resultados del trabajo, por ello ya no deberían estar en el puesto por tanto tiempo. “Si se tratara de cualquier trabajador ya habrían sido despedidos”, aseveró.
Agregó que a Cuauhtémoc Blanco lo dejaron rodeado, “impedido de hacer cosas y lo hemos estado ayudando. Voy a seguir visitando Morelos y estamos apoyando a ese pueblo que es extraordinario, ejemplar”, finalizó el presidente.
El Heraldo de México
