Las autoridades estadounidenses anunciaron el arresto de otras cuatro personas en relación con las muertes de 53 migrantes el año pasado, incluidos ocho niños, que fueron abandonados en un camión remolque en el abrasador verano de Texas.
Las autoridades señalaron que los cuatro imputados estaban al tanto de que el aire acondicionado del camión remolque no funcionaba y no refrescaría a los migrantes atrapados en su interior durante el trayecto de casi tres horas de duración.
Cuando el remolque fue abierto en San Antonio, 48 migrantes ya estaban muertos. Otros 16 fueron trasladados a hospitales, donde cinco de ellos fallecieron.
El conductor y otro hombre fueron arrestados poco después de encontrar a los migrantes. Fueron acusados de tráfico de humanos que resultó en muerte y de asociación delictuosa.
Los cuatro nuevos arrestos fueron realizados el lunes en Houston, San Antonio y Marshall, Texas. Las autoridades dijeron que la operación de contrabando transportaba migrantes desde Guatemala, Honduras y México compartiendo rutas, guías, escondites, camiones y remolques, algunos de los cuales se guardaban en un estacionamiento privado de San Antonio.
Las autoridades arrestaron a Riley Covarrubias Ponce, de 30 años de edad; a Felipe Orduña Torres, de 28; a Luis Alberto Rivera Leal, de 37, y a Armando Gonzales Ortega, de 53.
Todos fueron acusados de asociación delictuosa para transportar migrantes que resultó en muerte, de causar lesiones corporales graves y de poner vidas en peligro. Cada uno enfrenta una pena máxima de cadena perpetua si es declarado culpable.
“Los traficantes de humanos se aprovechan de la esperanza de los migrantes por una mejor vida, pero su única prioridad son las ganancias”, señaló el secretario de Justicia estadounidense, Merrick Garland, en un comunicado.
“Trágicamente, 53 personas que habían sido subidas en el tractocamión en Texas y soportaron horas de crueldad inimaginable perdieron la vida a causa de este ardid sin corazón”.
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