Con sólo la educación primaria terminada, Palma Salazar comenzó su vida en el crimen robando autos, para luego llamar la atención de un ex policía llamado Miguel Ángel Félix Gallardo. Aquel sujeto no era cualquier desertor de la policía, sino el líder del extinto Cártel de Guadalajara. Lo conocían como “El Padrino” o “El Jefe de Jefes”.
Félix Gallardo era el mayor capo del narcotráfico en México en las últimas décadas del siglo pasado. El ascenso de “El Güero” Palma dentro de la organización criminal fue fugaz, rápidamente pasó de ser sicario a organizar el tráfico de toneladas de droga desde Sonora hacía Estados Unidos. A su vez, dentro del Cártel de Guadalajara crecía otro sicario: Joaquín Guzmán Loera “El Chapo”.
“El Güero” y “El Chapo” se hicieron amigos cercanos.
Los escalones que estos dos criminales habrían subido dentro del cártel no fue visto con buenos ojos por otros miembros de la organización, especialmente por los hermanos Arellano Félix, Benjamín y Ramón, quienes eran familiares de “El Jefe de Jefes”.
Sin embargo, Félix Gallardo veía con buenos ojos a los jóvenes narcotraficantes.
El asesinato de Enrique Camarena, “El Kiki”, agente encubierto de la DEA, cambio todo para el cártel.
Autoridades estadunidenses aseguraron que los responsables del asesinato eran Félix Gallardo, así como dos viejos conocidos: Rafael Caro Quintero y Ernesto Fonseca Carrillo.
Por ello, poco a poco, los tres fueron aprehendidos, provocando que el Cártel de Guadalajara repartiera las rutas del narcotráfico que tenía.
Sin embargo, la aprehensión de Félix Gallardo ocasionó una guerra entre “El Güero” y “El Chapo” contra los Arellano Félix.
Enfrentamientos, matanzas, decapitados y hasta bombas protagonizaron la violencia en el norte del país.
Y es aquí donde llega la tragedia en la vida de Palma Salazar.
Rafael Clavel Moreno, un apuesto venezolano, fue contratado para enamorar a Guadalupe Leija, la esposa de “El Güero” Palma, y convertirse así en su amante.
La enamoró a tal grado que la convenció de abandonar a su esposo, junto con sus dos hijos Héctor y Nataly, para huir a Estados Unidos.
Ya en San Francisco, Clavel Moreno asesinó a Guadalupe y le robó 2 millones de dólares.
Por su fuera poco, decapitó a la mujer y, en una caja metálica refrigerada, envió su cabeza a “El Güero” Palma.
A las dos semanas del asesinato de Guadalupe, Rafael se llevó a los hijos del capo, de cuatro y cinco años de edad, a Venezuela, donde los arrojó desde el puente de la Concordia, en San Cristóbal, muriendo tras la caída libre de 150 metros.
Sobre los responsables de ordenar sanguinario ataque contra la familia de “El Güero” Palma hay dos señalamientos.
El primero recae en Miguel Ángel Félix Gallardo, quien habría tomado esa venganza luego de que Palma Salazar se quedara con una parte de la mercancía que tenía que cruzar a Estados Unidos.
Los segundos señalados, por la naturaleza de su rivalidad, fueron los hermanos Arellano Félix.
Tras la muerte de su esposa e hijos, “El Güero” llevó una serie de venganzas con gente cercana tanto de Félix Gallardo como de los Arellano Félix. Incluso, Clavel Moreno fue detenido en Venezuela y asesinado dentro de prisión.
Como es costumbre de los capos de la droga, Palma Salazar construyó un mausoleo para su familia en el panteón Jardines de Humaya, en Culiacán, Sinaloa.
Pinturas de su esposa e hijos rodeadas de ángeles adornan el mausoleo con costo de aproximadamente medio millón de dólares.
La guerra entre los Arellano Félix y “El Güero” y “El Chapo” continuó hasta el asesinato de Ramón y la aprehensión de Benjamín, dejando una victoria parcial a los sinaloenses, quienes, junto con Ismael “El Mayo” Zambada y Juan José Esparragoza Moreno, “El Azul”, fundaron el Cártel de Sinaloa.
Así vez, surgieron otras organizaciones que se desprendieron del Cártel de Guadalajara, como el Cártel de Tijuana, de los Arellano Felix; o el Cártel de Juárez, de Amado Carillo, “El Señor de los Cielos”.
Tras la detención de “El Chapo” en Guatemala, el 9 de junio de 1993, por el asesinato del cardenal Juan Jesús Posadas Ocampo, en Guadalajara, “El Güero” y “El Mayo” se encargaron principalmente de las operaciones del Cártel de Sinaloa.
Así vivió sus mejores años hasta que fue detenido en 1995 en una casa de Zapopan, Jalisco, curándose de las lesiones que le dejaron el desplome en Nayarit de la avioneta donde viajaba días antes rumbo a una boda en Toluca, Estado de México.
En 2007, Palma Salazar fue extraditado a Estados Unidos, donde estaría tras las rejas hasta 2024, sin embargo, tras nueve años y buen comportamiento, fue liberado en 2016, pero deportado inmediatamente a México, donde se encuentra aprehendido.