Una tragedia derivó de una serie de eventos desafortunados en Nueva York, Estados Unidos, luego de que un hombre muriera de un infarto dentro de su departamento el cual compartía con su hijo, un bebé de dos años, quien tras permanecer solo también perdió la vida por inanición, informó la oficina del Sheriff de Ontario, mediante un comunicado.
Las víctimas fueron identificadas como David Conde, de 59 años, y David Conde Jr, de dos, a quienes su familia comenzó a buscar tras una semana de no saber nada de ellos, por lo que las autoridades comenzaron a investigar, realizando el terrible hallazgo.
Fue un 15 de febrero de 2022 cuando llegaron al departamento, ubicado en Serenity Manor Apartments en Hamilton Street, en Ginebra. El lugar estaba completamente normal, la entrada no se veía forzada ni había ninguna irregularidad. De acuerdo a los investigadores, los cadáveres no tenían signos de violencia, por lo que se inició una investigación por las muertes.
En un principio se creyó que las muertes habían ocurrido por inhalación de monóxido de carbono, pero las investigaciones demostraron que no. Nueve meses después se dio el dictamen oficial.
Se estableció que David Conde murió como resultado de una enfermedad cardiovascular y luego, al no poder tener acceso a algún alimento, falleció el niño de dos años. La causa se informó en el comunicado emitido por la oficina del Sheriff: muerte por hambre.
Hallazgo de los cuerpos
David Cirencione, teniente del alguacil del condado de Ontario, dijo en una rueda de prensa que el departamento estaba limpio y bien cuidado; que había comida y ropa para el niño. Recalcó que lo único que notó es que hacía frío adentro de la vivienda y la calefacción estaba apagada.
También informó que los dos fueron encontrados juntos en el dormitorio del apartamento, el hombre en la cama y el niño cerca de esta.
“Fue una escena muy difícil, muy perturbadora, no es algo que vemos todos los días. No es agradable”, dijo Cirencione.
El padre David Conde, se quedó con la custodia del menor de dos años, poco tiempo después de que nació. La madre, Cirencione, estaba algo distanciada del niño y no habían tenido contacto reciente.
Según el obituario, el menor nació en Rochester, el 29 de octubre de 2019, afirma que mantenía con una “sonrisa determinada y una disposición dulce”. El niño acababa de aprender a caminar “luego de muchas cirugías y meses de yesos y rehabilitación”.
El Heraldo de México