La campeona estadunidense Jessica McCaskill abrumó a la mexicana Alba Ibarra el sábado por la noche en San Antonio, Texas.
La peleadora de Monterrey subió al ring dispuesta a cortar la racha de Jessica McCaskill, quien tiene en su poder los cuatro principales títulos mundiales en la división welter – pero a 10 segundos de iniciado el cuarto round la contienda paró. En la esquina de la mexicana un caos, mientras el entrenador le ponía el protector bucal se escuchaba como ella decía “no, yo solo quiero llegar con mi hijo a la casa” y al final la contienda se detuvo para decretar un nocaut a favor de la monarca.
Alma disputaba su primera oportunidad mundialista y no fue sencillo, el estilo de McCaskill poco ortodoxo y demasiado agresivo la metió en aguas profundas, pero la mexicana se las estaba ingeniando para inclinar la balanza a su favor gracias a su mayor tamaño, peso y alcance. Sin embargo, en alguno de los intercambios algo se rompió y Alma Ibarra tomó la decisión de no seguir adelante.
Para la mexicana esta era la oportunidad de su carrera, pues ya en el pasado se le negó la oportunidad de ir a los Juegos Olímpicos y ella había mencionado que esta era la revancha que necesitaba para seguir adelante con su carrera.
McCaskill – de sangre mexicana – mejoró con este triunfo su récord a 12 victorias, dos derrotas y 5 nocauts en lo que fue su tercera defensa del campeonato indiscutido y aseguró que después de este encuentro espera que lleguen las peleas ante representantes de mayor nivel o una pelea contra otra campeona indiscutida.
Milenio