Luego de que Juan David Cuellar, taxista que asegura quiso ayudar a Debanhi Escobar, joven que desapareció el pasado 9 de abril y apareció sin vida 13 días después en la cisterna de un hotel, la grafologa Maryfer Centeno analizó el lenguaje corporal del chofer, pero también el de Sarahí e Ivonne, amigas de la hoy occisa.
“Las expresiones de Juan David Cuellar empiezan con enojo y además vemos que va vestido de negro, lo cual le va a dar seriedad, pero también nos habla de cómo se siente. Evidentemente este hombre no tiene asesores, no creo que tengas los recursos económicos”, comenzó a platicar Maryfer en torno a la única entrevista que ha dado el taxista.
“Quiero hacer hincapié en cómo las respuestas que da son muy claras… las respuestas son inmediatas, está diciendo las cosas tal y como las recuerda”, agrega.
“Vemos todo el tiempo gestos de desaprobación, cejas levantadas a manera de sorpresa… Cuando una persona miente, generalmente es más escueto… Vemos como él constantemente niega con la cabeza porque es algo de lo que no quiere hablar, está agotadísimo… No siempre ve para abajo, ver para abajo significa vergüenza, está preocupado… En toda la entrevista no sonríe ni una sola vez, encuentro congruencia entre lo que dice, el cómo se mueve y el tono de la voz“, explica la grafologa y colaboradora de ‘Hoy’.
Maryfer Centeno también comentó que Juan David tiene una postura cerrada porque no confía en el entrevistado. “Las respuestas son muy largas… las respuestas son muy rápidas… Definitivamente hay que decirlo, no hay indicador de mentira por parte del taxista“, asegura la experta.
Por otra parte, Maryfer también analizó el lenguaje corporal de las supuestas amigas de Debanhi, pues llevaba muy poco tiempo de conocerlas: “Traen cubrebocas porque no quieren ser vistas, porque saben que son perseguidas por la sociedad, pero además son para muchos las grandes culpables”, explica.
“El tono tan bajo de voz es porque tienen miedo de hablar… Lo que buscan estas mujeres es deslindarse de todo, de absolutamente todo, estas señoras, estas mujeres no se mueven, están totalmente tiesas, solamente culpan y cukpan a Debanhi”, explica.
“Me asombra cómo pueden hablar sin mover las manos… Ellas son aliadas, tampoco son amigas porque apenas se conocen… No hay congruencias, están muy tensas, se están ocultando, vemos un nerviosismo, un gran parpadeo… Vemos también dos mujeres que no saben expresarse”, remata Maryfer Centeno.
TV Notas
