A un conocido “centro de sanación” del municipio de Rioverde, han acudido los padres de al menos cinco menores, con la intención de que “les dieran una barrida” a sus hijos, por las “severas” crisis nerviosas que sufrieron tras haber jugado “Charlie Charlie”, el juego que se difundió como parte de la publicidad de una película y que en pleno siglo XXI, refrendó la prevalencia de las supersticiones.
Menores entre 11 y 12 años de edad, que han practicado el juego, han presentando cuadros de miedo, orillando a los padres de familia a buscar apoyo.
Al respecto el presbítero Christian González Facundo, señaló que “más que el juego es la situación del los jóvenes”.
“Nuestros jóvenes son fácilmente impresionables, es una moda. Piensan: ahorita esto me conviene, me llama la atención y me perturba” aseveró.
“Situación que genera inestabilidad en los jóvenes, situación que genera un problema social”, concluyó y dijo que es responsabilidad de las familias es dar fortaleza a los adolescentes.
Fuente: Plano Informativo
