La inseguridad en la avenida Venustiano Carranza, una de las principales arterias de la capital potosina, ha aumentado considerablemente en los últimos años, lo que ha derivado en el cierre de varios comercios y una creciente crisis económica en la zona. La delincuencia no solo afecta a los negocios activos, sino también a los locales vacíos, que rápidamente se convierten en objetivos de vandalismo, grafitis y actos destructivos.
Un claro ejemplo es la antigua sede de la Secretaría de Ecología y Gestión Ambiental (SEGAM), que hoy en día se encuentra completamente destruida y ocupada por personas en situación de calle. Además, otros comercios, como una cafetería que cerró hace algunos meses, han sido objeto de vandalismo, con la fachada dañada y la puerta rota. La situación ha empeorado, ya que el local vacío también muestra señales de haber sido ingresado por personas ajenas al negocio.
Este fenómeno no es aislado, ya que en la misma zona han cerrado otros comercios, como una cafetería ubicada en Plaza Las Américas y una panadería, que corren el riesgo de ser igualmente destruidos si la situación de inseguridad persiste. Además, varios negocios a lo largo de la avenida Carranza, desde Uresti hasta el Jardín de Tequisquiapan, también han cerrado, muchos de ellos debido a la imposibilidad de estacionarse por la instalación de la ciclovía, además de las afectaciones económicas derivadas de la pandemia del Covid-19.
Cabe señalar que la violencia también ha dejado huella en la zona. El 1 de mayo de 2023, un joven de 24 años, Sua Jocsan Marín, fue asesinado a puñaladas en un intento de asalto a plena luz del día en la avenida Venustiano Carranza, situación que refleja la creciente preocupación por la seguridad en la zona.
