A partir de este sábado, Clara Brugada asumirá el cargo de jefa de Gobierno de la Ciudad de México, convirtiéndose en la décima persona en ocupar esta posición. Aunque no buscaba este puesto, fue impulsada por los “duros” de Morena a postularse, enfrentando ahora la responsabilidad de liderar una de las capitales más complejas del continente.
La nueva mandataria tiene más de 40 años de experiencia en la lucha social. Inició su carrera política a los 32 años, cuando fue elegida como consejera ciudadana en Iztapalapa. A lo largo de casi 30 años de servicio público, Brugada ha desarrollado una amplia trayectoria legislativa, aunque se define a sí misma como una política no tradicional, ya que nunca ha buscado cargos de elección popular.
Su entorno la describe como una luchadora social incansable y una funcionaria cercana a la gente, que escucha y toma decisiones de manera colectiva. Su próximo secretario de Gobierno, César Cravioto, destacó que su experiencia en las comunidades más vulnerables le permitirá comprender los problemas de los ciudadanos y aportar soluciones efectivas.
Brugada comenzó su carrera en la vida pública en 1984, cuando estudiaba Economía en la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), en Iztapalapa. Fue entonces que aceptó el reto de dar clases en una secundaria comunitaria en San Miguel Teotongo, donde decidió mudarse y vivir en condiciones que no eran las de su hogar. Durante más de una década, trabajó en movimientos sociales que abogaban por la salud, el medio ambiente y la alimentación de los más necesitados.
En 1991, conoció al ex presidente Andrés Manuel López Obrador durante el “éxodo por la democracia”. Brugada y su comunidad brindaron apoyo a los activistas tabasqueños que llegaron a Iztapalapa, lo que marcó el inicio de una relación cercana con López Obrador, participando en diversas movilizaciones a lo largo de los años.
Después de ser elegida como consejera ciudadana, ganó una diputación federal en 1997, y continuó su trayectoria como diputada en la entonces Asamblea Legislativa del Distrito Federal y luego en la Cámara de Diputados. En 2006 fue nombrada procuradora social del D.F., y en 2009 se convirtió en la primera jefa delegacional de Iztapalapa. Posteriormente, en 2016, fue elegida diputada constituyente y en 2018 ganó la alcaldía de Iztapalapa, donde fue reelegida en 2021.
Durante su tiempo en la alcaldía, trabajó estrechamente con la entonces jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, y la colaboración entre ambas ha sido constante. En 2023, Clara tuvo que tomar la decisión de competir por la candidatura de Morena a la Jefatura de Gobierno. Aunque al principio no deseaba participar, la insistencia de sus compañeros y la base social la convencieron de que era necesaria en ese papel.
César Cravioto, su futuro secretario de Gobierno, explicó que la decisión de elegirla como candidata no fue solo suya, sino del movimiento en su conjunto. Según él, Clara es la opción ideal para liderar la Ciudad de México, y su trayectoria garantiza que continuará con el proyecto de transformación que han impulsado López Obrador, Marcelo Ebrard y Claudia Sheinbaum.
Brugada asumirá el liderazgo en un momento crucial, donde su experiencia y compromiso con la comunidad son fundamentales para enfrentar los retos de la ciudad y continuar el legado de los líderes anteriores.