En la inauguración de otro antro «Jotas Room», ahora en la colonia Alamitos, las autoridades de Gobernación acudieron a inspeccionarlo y ante presuntas flagrantes violaciones a la ley procedieron a clausurarlo.
Sin embargo, aprovechando que el 24 y 25 no había operativos de inspección, aparentemente el propietario violentó los sellos de clausura y volvió a operar a pesar de las restricciones impuestas por la autoridad.
El pasado día 23 poco antes de las doce de la noche, inspectores de la Dirección de Gobernación del Estado acudieron a inspeccionar la nueva sucursal del antro «Jotas Room», que se estaba inaugurando en el número 380 de la avenida Mariano Jiménez, a un costado de la gasolinera Alamitos.
Los inspectores ingresaron al establecimiento y revisaron instalaciones y que los documentos estuvieran en orden, pero ante flagrantes anomalías decidieron clausurarlo y pusieron los respectivos sellos, desalojando a los pocos clientes que había en el lugar.
No obstante y de acuerdo a versiones de clientes, para los días siguientes, 24 y 25 el antro ya estaba abierto nuevamente, al parecer el dueño aprovechó la ausencia de operativos de inspección.
Cabe señalar que en múltiples ocasiones, los demás antros «Jotas Room» (zona centro y San Sebastián) han sido objeto de clausuras por supuestas anomalías, pero el propietario no tarda en reabrir y ya en una ocasión fue detenido por la Policía Estatal por violentar sellos con dos de sus empleados, esto en otro antro de su propiedad en la avenida Damián Carmona.
Pulso
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