La inmobiliaria se ahorra más de un año de trámites con la firma de Secretario del Ayuntamiento.
Con facultades que sólo tiene el Cabildo capitalino, el secretario general del Ayuntamiento Juan Ramón Nieto Navarro autorizó las claves catastrales para “La Vista” pero entregadas a una empresa distinta al grupo desarrollador.
Según se hace constar en documentación en poder de Pulso, el funcionario municipal celebró con la empresa Constructora Huerta Real, S.A. de C.V., un convenio que, en su cláusula primera, establece que el Ayuntamiento promete establecer las condiciones mediante las cuales, la Dirección de Catastro y Desarrollo Urbano llevará a cabo el otorgamiento de las claves catastrales solicitadas por esa constructora.
Nieto Navarro firmó el acuerdo con Huerta Real para asignar claves a predios de La Vista. Con este trámite la desarrolladora “se ahorró” gestiones de cuando menos un año para conseguir permisos y autorizaciones del Cabildo.
La autorización de Nieto Navarro saltó el procedimiento de aprobación de las dos terceras partes del Cabildo para establecer en su fracción VI del inciso A, las regulaciones en materia de planeación. Pasa sobre el artículo 70 al atribuirse facultades del Presidente Municipal que deben ser aprobadas por el Cabildo o el Congreso del Estado y el artículo 75 en materia de las facultades y obligaciones de los síndicos al refrendar con su firma y únicamente con ella convenios que por cierto no fueron autorizados por el Cabildo.
Un secretario del Ayuntamiento sólo debe autentificar con su firma las actas y documentos emanados del Cabildo y del Alcalde.
El Secretario General condujo al Ayuntamiento capitalino a realizar las acciones necesarias para otorgar las claves catastrales a la constructora Huerta Real sobre predios de “La Vista”; la empresa obtuvo recibo original generado a consecuencia del otorgamiento de las claves catastrales solicitadas por la empresa y a otorgar en un término no mayor a 7 días las claves catastrales pedidas.
Así, las claves catastrales modifican la extensión del fraccionamiento, causando perjuicios a sus vecinos.
Fuente: Pulso