Los planes por rescatar a la vaquita marina cada vez son más ambiciosos: aunque desde hace años se baraja la posibilidad de clonar a la especie (pues se calcula que podrían ser 19 los individuos aún con vida), ahora el presidente del Comité Internacional para la Recuperación de la Vaquita, Lorenzo Rojas-Bracho ha dicho a Excelsior que la embarcación que tendría entre sus tareas, recoger material genético de un macho para hacer posible en un futuro las clonaciones, podría zarpar “en cualquier momento“.
El también doctor en biología marina enfatizó en que dos barcos del Museo de la Ballena y de la organización Sea Shepherd ingresarán con fines de investigación en el Alto Golfo de California. Además de tratar de conseguir ADN de un macho, también se hará un nuevo recuento de especímenes con vida.
La hazaña de conseguir ADN de una vaquita marina
Rojas-Bracho explica que el trabajo correrá a cargo de “tiradores“, quienes tendrán un arpón que puede dispararse desde una embarcación que esté a 20 metros del individuo. El arpón solo con tocar a la vaquita puede conseguir una muestra de un pedazo de piel para luego hacer un cultivo en laboratorio.
“Le disparas con una flechita especial que no lastima y se queda con un pedacito de piel, esa muestra hay que llevarla inmediatamente al laboratorio para hacer el cultivo del tejido y obtener el cromosoma Y”
Lorenzo Rojas-Bracho
Solo se buscará el tejido de una vaquita marina macho para obtener su ADN, puesto que óvulos de hembras ya están en criogenia con ayuda de nitrógeno líquido en el zoológico de San Diego. Ese material genético se conserva a -195 grados centígrados.
La clonación en realidad no es un proyecto que se pueda llevar a cabo inmediatamente. El propósito es tener todo el material genético para hacer realidad el proyecto eventualmente. Mientras aquello ocurre, Rojas-Bracho asegura que las prospectivas sobre la clonación son buenas, puesto que en la primera etapa de secuenciación de todo el genoma de la vaquita marina se ha determinado que no hay deficiencias genéticas pese a lo reducida que está su población actualmente.
Aunque la clonación pueda ser una realidad en pocos años, los daños de la exterminación de individuos silvestres es irrevocable, de acuerdo a Miguel Canseco de la Asociación Mexicana de Hábitats para la Interacción y Protección de Mamíferos Marinos (AMHMAR) y para Jorge Rickardsdirector de WWF.
Entrevistados ambos por Excelsior estimaron que individuos que en un futuro sean clonados, necesitarán un programa de acompañamiento, que consista en una fase primera de cuidados humanos, y eventualmente una fase de liberación a la vida silvestre. El proceso es tan largo que podría llevar más de 60 años.
El tema de fondo, aunque la ciencia puede hacer algo por él, en realidad tiene raíces de índole social dice Rickards.”Hay que seguir avanzando con la ciencia, pero la problemática es social”
Las estimaciones de individuos de vaquita marina son complejos, debido a que la especie está en zona de aguas turbias en el Golfo de California, y a que suelen evitar a toda costa el contacto con humanos. La población de la vaquita marina se ve mermada por la existencia de redes de pescadores que en realidad buscan cazar totoaba, cuyo buche se vende en 8,500 dólares el kilo en mercados asiáticos.
Aunque han existido programas gubernamentales para disuadir a pescadores de que usen las redes tradicionales, ninguno ha tenido éxito en disminuir la caza de la totoaba. El problema para Rickards es que no se ha incentivado adecuadamente a los pescadores, ni se han creado planes de acompañamiento para resarcir su baja de ingresos al dejar de pescar totoaba.
Xataka