El local abandonado que la empresa Ómnibus de México operó hace años en la avenida 20 de Noviembre, frente a la actual Zona de Transferencia de autobuses urbanos, podría requerir de la intervención de diversas área municipales e incluso estatales y federales para su remediación.
De acuerdo con fuentes del gobierno municipal, estos casos de fincas abandonadas dentro del perímetro del Centro Histórico se vuelven complejos por la cantidad de dependencias que pueden o no, tener injerencia en el tema.
Debido a que se trata de un local que tuvo uso lucrativo, podría ser responsabilidad de la Dirección de Comercio emitir un dictamen y contactar a los dueños para que realicen la limpieza y protección del sitio.
También podría haber intervención del área de Desarrollo Urbano y Catastro para conocer el estatus legal del local en la actualidad. A su vez, puede requerirse una evaluación de la Coordinación Municipal de Protección Civil o de la estatal, e incluso algún dictamen de la delegación del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) para descartar que la finca posea algún valor histórico.
Mientras tanto, el inmueble abandonado sigue albergando personas en situación de calle y generando condiciones de inseguridad en el rumbo.
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