La Comisión Nacional del Agua (Conagua) y el Gobierno de Nuevo León trabajan de forma conjunta para terminar con los llamados “huachicoleros de agua” existentes en plena escasez.
Recordemos que la entidad vive una fuerte crisis ante el desabasto de agua y, por tal situación, Conagua decidió realizar operativos de inspección para detectar cualquier toma clandestina que agrave aún más esta situación.
Luego de realizar dichos operativos de inspección por parte de elementos del Organismo de Cuenca Río Bravo (OCRB) en varias regiones del estado al norte del país, Conagua informó que se localizaron, alrededor de, siete tomas clandestinas.
Conagua va por “huachicoleo”
Si bien, el término “huachicoleo” se había usado para referirse a las acciones de suministro clandestino de combustibles como la gasolina. Ahora, también se utilizó para señalar el robo de agua.
Y es que, en la entidad al norte del país se vive una fuerte crisis ante la escasez de agua. Por ello, Conagua realizó operativos de inspección cerca de Linares, donde se detectaron cinco equipos de bombeo irregulares.
Así mismo, en las orillas del Río Ramos ubicado en Allende se localizaron dos tubos de extracción a pleno cielo abierto que eran utilizados para rellenar una laguna artificial en un predio privado.
Acciones para protección del agua
El director general del Organismo de Cuenca Río Bravo (OCRB), Luis Carlos Alatorre, aseguró que la detección oportuna de estas tomas irregulares debe ser un tema de importancia conjunta entre gobierno y ciudadanía.
Por lo que, invitó a los pobladores de la entidad a sumarse a las acciones de vigilancia y denuncia de este tipo de actos que agravan la situación actual en Nuevo León, haciendo referencia al “huachicoleo de agua”.
Así como señaló que se procederá con estricto apego a la ley contra quien resulte responsable de las tomas clandestinas localizadas en pro de salvaguardar los recursos hídricos en Nuevo León.
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