La negativa al paso ha dejado a muchos de ellos padeciendo y sin un destino claro
De nueva cuenta la historia en la fronteriza Ciudad Juárez se repite en torno al tema de los migrantes, tal como sucedió el 18 de diciembre de 2022, imágenes que se hicieron recurrentes todo el dos mil veintitrés, residentes de Ciudad Juárez alimentando, vistiendo y protegiendo migrantes, albergues a su máxima capacidad, ser testigos de cómo ciudadanos de distintas nacionalidades intentaban ingresar a los Estados Unidos en grandes grupos.
La mayoría busca conquistar el “sueño americano“, tras una larga travesía. Las autoridades estatales han vivido imposibilitadas para dar una respuesta clara a esta problemática y una visible apatía por parte de la federación fue el común denominador en ese 2023.
Estos problemas son síntesis y vivencias de lo se repite en la frontera. Ahora llega un nuevo ingrediente a restarle a los migrantes: la postura radicalizada del vecino estado de Texas. Hace unos días el gobernador Greg Abbott aprobó el decreto con el cual todas aquellas personas que ingresen ilegalmente a este estado serán detenidas por las autoridades y procesadas penalmente.
El derecho humano a la migración es considerado un delito en dicho estado. Esto es un enfrentamiento con la política de “Fronteras Abiertas” de la administración que encabeza Joe Biden.
Texas colinda con los estados de Chihuahua, Coahuila, Nuevo León y Tamaulipas y si bien esta nueva ley entra en vigor hasta marzo del 2024, aún no queda claro si los migrantes ilegales detenidos van a ser canalizados a oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) o devueltos a México a pesar de que muchos de ellos son originarios de otros países latinoamericanos.
La situación se complica aún más por la misma oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP), la cual decidió cerrar dos importantes cruces fronterizos Eagle Pass y El Paso Texas al tránsito de ferrocarriles de carga, asegurando que se ven orillados a movilizar su personal para atender el problema migratorio que consume demasiado tiempo en trámites con los migrantes que esperan la decisión de si se les otorga asilo o no.
Situaciones similares se han presentado en otros puntos. Recientemente se decidió cerrar la frontera a tráileres de carga por varias semanas, lo que de acuerdo con las organizaciones empresariales y del sector maquilador en México ocasionó pérdidas por el orden de los mil 900 millones de dólares.
Actualmente tras esta decisión varias rutas de ferrocarril han sido detenidas y por lo menos en el estado de Chihuahua específicamente en la capital del estado al parar el tren cerca de 800 migrantes quedaron varados., algunos decidieron continuar a pie un trayecto de caso 400 kilómetros, otros pidiendo aventón corriendo él peligro de ser secuestrados por los grupos delincuenciales.
De acuerdo con las autoridades, los criminales están logrando ingresos por un millón de dólares mensuales gracias a las extorsiones contra los migrantes. Un escenario que se repite en acciones, omisiones y que ha convertido este fenómeno de la migración en parte de la cotidianeidad que se vive en esta frontera norte.
Mientras, miles de migrantes luchan por intentar buscar un futuro mejor, en el cual hay que soportar y superar infinidad de pruebas y retos.
– El Heraldo de México