El gobierno de Venezuela anunció la detención de un cuarto ciudadano estadounidense, acusado de espiar instalaciones estratégicas, como parte de un supuesto complot para asesinar al presidente Nicolás Maduro y altos funcionarios de su gobierno. Diosdado Cabello, ministro del Interior, informó que el detenido fue capturado en Caracas mientras tomaba fotografías a instalaciones eléctricas, petroleras y unidades militares.
Este arresto se suma a las recientes capturas de otros tres estadounidenses, incluidos el marine mexicoamericano Wilbert Castañeda, dos españoles y un ciudadano checo, todos señalados de estar involucrados en un plan contra el gobierno venezolano.
El Departamento de Estado de Estados Unidos ha confirmado estar al tanto de los informes sobre el arresto del último ciudadano estadounidense, aunque reiteró que su capacidad de brindar asistencia en Venezuela es “severamente limitada”. Al mismo tiempo, negó estar involucrado en un complot contra Maduro, afirmando que no existe tal plan por parte de su gobierno.