Ubicada en el encantador Pueblo Mágico de Xilitla, la Cueva del Salitre es un paraje natural que permanece escondido entre la exuberante vegetación de la Huasteca potosina. Aunque este sitio es poco conocido entre los turistas, su belleza atrae a senderistas y amantes de los deportes extremos, como la escalada.
La cueva recibe su nombre por la alta humedad que contiene en su interior. Durante la temporada de lluvias, las filtraciones de agua inundan el lugar, formando una poza que impide llegar al fondo. El recorrido hacia la cueva comienza con un sendero que, en aproximadamente 10 minutos, ofrece vistas espectaculares desde la montaña.
Don Goyo, un habitante local y primer guía de turistas de la cueva desde que tenía solo 10 años, comparte que el turismo comenzó a visitar este lugar hace unos 50 años. A pesar de ello, sigue siendo un destino poco concurrido. La cueva tiene una entrada de alrededor de 100 metros y se extiende unos 300 metros hacia el interior.
Esta área es hogar de diversas especies de fauna, incluyendo mapaches, zarigüeyas, tejones y aves, e incluso ha habido avistamientos de pumas. Dentro de la cueva, las filtraciones de agua han dado lugar a formaciones naturales asombrosas, destacando la figura de una supuesta bruja de perfil, visible solo para quienes logran llegar al fondo.
Para explorar la cueva, se recomienda hacerlo con un guía. Quienes deseen practicar senderismo deben llevar calzado antiderrapante para evitar accidentes. Para llegar a la Cueva del Salitre, desde el centro de Xilitla se toma la carretera federal 120 en dirección a Huichihuayán. Cerca de las letras de Xilitla se encuentra la Posada La Cueva, que ofrece acceso al lugar por un costo de 50 pesos por persona.