Miami.— Ovidio Guzmán López, hijo de Joaquín El Chapo Guzmán, acude hoy a audiencia en la Corte del Distrito Norte de Illinois, Chicago, a las 10:45 de la mañana, en la que se definirá su situación jurídica. Está acusado de 12 cargos relacionados con el narcotráfico y lo recibirá la jueza Sharon Johnson Coleman.
Coleman lo procesó formalmente por cinco cargos que en ese momento pesaban sobre el acusado y de los cuales se declaró no culpable. La jueza Coleman ordenó, en ese momento, que se le mantuviera bajo custodia en el Centro Metropolitano Correccional de Chicago. Las cortes estadounidenses que lo requieren, además de Illinois, son las de los distritos federal del Sur de Nueva York y la del Distrito de Columbia en la capital estadounidense.
“No olvidemos que actualmente el Cártel de Sinaloa es uno de los que mayor tráfico de fentanilo lleva a cabo hacia Estados Unidos”, explicó a EL UNIVERSAL un exagente de la DEA, quien pidió el anonimato.
“Sus abogados decían que no habían sido avisados con el tiempo que marca la ley en México para impugnar la extradición”, explica el exagente de la DEA; “se decía que iban a pelear para cambiar la fecha de esta audiencia y tratar de alargarla, pensando que podrían apelar la manera en que fue extraditado, pero afortunadamente no fue así”.
El fiscal general del Distrito de Columbia, en la capital estadounidense, presentó en 2017 una acusación formal contra Guzmán López, señalándolo como traficante, desde 2008, de cocaína, marihuana y metanfetaminas hacia EU. “Desde entonces fue emitida la primera orden de detención y solicitud de extradición en su contra”, refiere el exagente.
El Universal