La llegada de Oribe Peralta al aeropuerto de Guadalajara fue una persecución debido al dispositivo de seguridad que Chivas intentó implementar con el fin de sortear a los medios de comunicación.
Pero, esto pareció demasiado, al menos porque la afición no lo esperaba. Se esperaba que algunos fanáticos del Rebaño se acercaran a la terminal para tener el primer contacto con el futbolista, pero la afición brilló por su ausencia.
No hubo una sola camiseta rojiblanca o expresión alguna de parte de fanáticos de Chivas ante la llegada de ‘El Cepillo’ a Guadalajara, la mañana de este martes al aeropuerto tapatío.
Minutos antes de que el avión arribara con el delantero a bordo, personal de seguridad de Chivas montó un dispositivo para sacar al futbolista por una puerta aledaña. Oribe viajó con su agente, Salvador Necochea.
Luego de mover el vehículo en el que transportarían a Peralta en dos ocasiones, este fue ingresado a la terminal aérea por una puerta alterna. Vidrios polarizados arriba, Oribe abandonó la terminal a bordo de dicha camioneta sin detenerse ante los medios que dieron con su paradero.
Por la tarde, el delantero realizó exámenes médicos esta tarde en la clínica de Rafael Ortega.
Tras tres horas de exámenes médicos, también fue sometido a una resonancia magnética para descartar alguna lesión. Al abandonar la clínica, solamente le aguardaban a Peralta dos aficionados, quienes no dejaron pasar la ocasión para tomarse una selfie con el nuevo delantero del Rebaño.
ESPN
