El desayuno es la comida más importante del día, por lo que el pequeño debe salir alimentado siempre en la mañana, con alimentos que le aporten energía y nutrición, porque de lo contrario redundará en forma negativa en su rendimiento escolar, además prolongará su ayuno y a la larga le provocará obesidad.
Así lo indicó la nutrióloga del Seguro Social en San Luis Potosí, Diana Amaris Álvarado Paniagua, quien dijo que el mismo puede estar sustentado en el Plato del Buen Comer, ya que combina elementos nutritivos vitales y no necesariamente de alto costo, como son: cereales, frutas, verduras y grasas buenas.
“Es la principal comida del día, al ayunar lo que estamos haciendo es que la memoria de nuestro cuerpo se prepare para espacios de tiempo largos, lo que provoca que el alimento –al ingerirse- se guarde en forma de grasa y no en forma nutritiva”, detalló.
Dijo que con el retorno a clases, las madres deben de forjar el hábito de alimento desde que el pequeño se levanta, y no desde que éste lo pide, es decir, el desayuno es el alimento más importante porque está satisfaciendo un ayuno prolongado.
La especialista en nutrición explicó que el desayuno puede ser ligero y basado en algún licuado preparado con alguna fruta y combinado con cereales, o bien leche y huevo.
“No nos consta que el niño almuerce en la escuela, que desayune lo que le ponemos o lo cambie con el compañero por otra cosa, por eso es importante que nunca salga de casa sin desayunar”, detalló Amaris Paniagua.
Pidió estar atenta a situaciones como la obesidad, la cual puede ser desarrollada por un niño que no desayuna, ya que lo que se está provocando es la acumulación de reservas de grasa, cuando se acostumbra al organismo a ayunos prolongados.
Esta situación se agrava cuando el menor regresa con hambre de la escuela y lo primero que encuentra será un alimento poco nutritivo y con alto contenido calórico como galletas o jugos.
Fuente: Pulso