El Instituto de Fiscalización Superior del Estado (IFSE) informó que durante la instalación de los 59 ayuntamientos de San Luis Potosí, algunos alcaldes salientes dificultaron el proceso de entrega-recepción. De acuerdo con el auditor superior, Rodrigo Lecourtois López, entre dos y tres presidentes municipales se negaron a proporcionar la información necesaria a los alcaldes entrantes, lo que podría generar sanciones en un plazo de 30 días.
El proceso de entrega-recepción, que comenzó a principios de octubre, establece que las nuevas administraciones tienen un mes para presentar observaciones sobre irregularidades o la falta de documentación. Lecourtois López afirmó que los alcaldes que no entregan la información están afectándose a sí mismos, ya que son responsables de ese proceso.
“En algunos casos, los formatos de entrega-recepción no fueron presentados hasta que llegaron los auditores del IFSE”, señaló Lecourtois, quien también mencionó problemas con la transferencia de inmuebles y un descontrol general en algunos municipios. Las contralorías internas y los contralores designados por las nuevas administraciones deberán gestionar estas observaciones dentro del periodo establecido.
El titular del IFSE también destacó que, aunque la falta de cooperación entre alcaldes de partidos diferentes ha disminuido, sigue siendo un problema en ciertos municipios. Esta falta de colaboración podría derivar en sanciones, ya que la responsabilidad de entregar la documentación recae en los salientes, y cualquier retraso afecta el cumplimiento del proceso por parte de las nuevas administraciones.
