La Fiscalía General de la República (FGR) detuvo el pasado 12 de agosto a Pedro Segura Valladares, empresario guerrerense y excandidato a la gubernatura por el PT y PVEM, acusado de delincuencia organizada. El arresto ocurrió en un hotel de Tepecoacuilco y fue transmitido en vivo por el propio Segura.
Su nombre ha estado ligado durante años a la investigación por la desaparición de los 43 estudiantes de Ayotzinapa, debido a sus presuntos vínculos con el grupo criminal Guerreros Unidos. De acuerdo con las autoridades, Segura habría brindado protección y apoyo logístico a la organización, e incluso facilitado propiedades para ocultar a algunos normalistas.
Uno de sus familiares, Francisco Salgado Valladares, exsubdirector de la policía en Iguala, ya cumple condena por delincuencia organizada y por su participación en el caso Ayotzinapa.
Segura también ha sido señalado como aliado del exalcalde de Iguala, José Luis Abarca, acusado de la desaparición de los estudiantes. Reportes periodísticos indican que habría intervenido para dividir a los padres de los normalistas con el fin de favorecer a Abarca.
En el pasado, mantas y mensajes atribuidos a grupos criminales lo han acusado de nexos con el narcotráfico. Incluso se le vinculó con el hotel donde murió el padre de un normalista en circunstancias polémicas.
Además, en 2024 fue sancionado por el Tribunal Electoral de Guerrero por violencia política de género contra la diputada Leticia Mosso.
La detención de Segura Valladares reaviva uno de los casos más dolorosos y polémicos de la historia reciente de México, dejando en manos de la justicia el esclarecimiento de su papel en estos hechos.