Día de la Candelaria: El Niño Dios, un símbolo de protección y esperanza

Cada 2 de febrero, el Día de la Candelaria es una fecha de profunda devoción en San Luis Potosí, donde miles de creyentes rinden homenaje al Niño Dios. La tradición de vestirlo con diversos atuendos, desde médicos hasta ángeles o pastorcillos, es una forma de agradecimiento por los favores y milagros recibidos a lo largo del año. Para muchos, el Niño Dios es más que una imagen religiosa; representa protección, esperanza y milagros en sus vidas.

Uno de los testimonios más conmovedores es el de doña Margarita Hernández, quien con 68 años recuerda cómo su devoción al Niño Dios la salvó de una grave enfermedad cardíaca cuando los médicos ya no podían hacer nada. “Él me salvó cuando los doctores ya no podían hacer nada”, relató, explicando que su fe en la imagen del Niño Dios la llevó a mejorar de manera inexplicable. En agradecimiento, cada año lo viste con un traje de doctor.

Otro relato similar es el de don Felipe Ramírez, quien compartió cómo, hace tres años, rezó al Niño Dios por la recuperación de su hijo, que estaba en coma tras un accidente. Tras hacerle una promesa de vestirlo de ángel, su hijo despertó y se recuperó contra todo pronóstico, y desde entonces, todos los años, cumplió su promesa.

Estas historias son solo una muestra de la fuerte devoción que se vive cada 2 de febrero, cuando el Niño Dios recibe no solo vestimentas especiales, sino también muestras de gratitud y fe por los milagros que las personas creen haber recibido a lo largo del año.

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