Se niega a cerrar válvulas del sistema que abastece desde presa El Realito.
No obstante que no hay certeza de que el agua que procede de la presa El Realito cumple con los estándares de sanidad, el director de la Comisión Estatal del Agua, Aldo Ruiz Hernández, se negó a ordenar el cierre de las válvulas del acueducto que alimenta la red de agua potable de la ciudad.
El Interapas solicitó desde el viernes pasado el cierre de dichas válvulas conectadas a los tanques de almacenamiento y distribución, luego de los constantes reportes y descontento de los habitantes de las colonias del oriente y sur de la Capital porque el agua de la presa El Realito se encuentra fuera de los límites máximos permitidos de color, olor, turbidez y sólidos suspendidos.
El agua incumple con las normas de olor, color, turbidez y sólidos suspendidos y aún así, el abasto ha costado al organismo operador 56 millones de pesos y la empresa operadora le cobra a 8 pesos con 50 centavos el metro cúbico mientras que el Interapas lo distribuye y factura a 5 pesos con 20 centavos y por lo tanto, le reporta pérdidas.
Denunció que la CEA no ha ordenado a la empresa Aquos El Realito cerrar las válvulas conectadas a los tanques de almacenamiento y distribución “Hostal”, “Termal” y “Balcones del Valle-Tangamanga 1”.
En virtud de que la Comisión Estatal del Agua incumplió con el cierre de las válvulas, el organismo operador Interapas envió una petición reiterada a la dependencia estatal, hasta en tanto mejoren las condiciones de la calidad del agua, que establece la NOM-127-SSAI-1994 “Agua para uso y consumo humano”.
Debido al flujo del agua que llega por gravedad desde más de cien kilómetros de distancia, el Interapas no pudo conectar los 11 pozos a la red de distribución de las colonias del oriente y sur de la ciudad.
En la compra-venta del agua de la presa, el organismo operador paga a la CEA 8 millones de pesos mensuales. Hasta junio había pagado a la dependencia estatal 56 millones de pesos.
Aldo Ruiz Hernández, director de la Comisión Estatal del Agua (CEA), dijo en entrevista que no conviene al organismo Interapas, operar con sus pozos porque no cuenta con la suficiencia económica para ponerlos a funcionar. “Si el Interapas quisiera ser unilateral, dejar de usar el agua del Realito pudiera ocasionar un problema económico para el organismo, tendría que pagar agua que no está consumiendo, paga nueve mil pesos por el servicio de manera mensual”.
Ruiz Hernández, reconoció que el agua que llega a los hogares tiene una apariencia contraria a estándares de calidad, con un tono amarillento y hasta con olor, sin embargo dijo que a pesar de ello “se mantiene la calidad” dentro de la norma que establece la Secretaría de Salud.
Dijo que actualmente se llevan a cabo unas pruebas para nuevamente determinar la calidad del agua, en dichos exámenes intervienen el Interapas, la Cea, laboratorios particulares y la Coepris, así como un fedatario público, los resultados estarían completos a más tardar el lunes que entra.
Fuente: Pulso