Después de haber servido 28 años al “primer soldado del PRI”, Emilio Azcárraga, y trabajar por décadas para la empresa Televisa y 15 más para Radio Centro, la Cámara de Diputados decidió “distinguir” a Jacobo Zabludovsky con la medalla al mérito cívico Eduardo Neri.
Con el regreso del PRI al poder, Zabludovsky tuvo de nuevo su momento de gloria al recibir el aplauso de priistas al recibir la medalla en el recinto legislativo de San Lázaro. Vocero de los gobiernos en turno, el comunicador sirvió casi tres décadas a los intereses del sistema tricolor.
A propuesta de la Comisión de Régimen y Prácticas Parlamentarias, el pleno de la Cámara de Diputados, con la abstención del legislador Ricardo Monreal, hizo un reconocimiento al conocido conductor y reportero. Entonces Zabludovsky recibió de manos del presidente de la Mesa Directiva, Francisco Arroyo Vieyra, la medalla Eduardo Neri.
Al argumentar la determinación de la comisión, su presidente, el panista Marco Aguilar Vega, lamentó que en estos momentos a México se le considere uno de los países más peligrosos para el ejercicio del periodismo”.
Luego consideró que “ha llegado el momento de exigir a las autoridades que se garantice la seguridad de los profesionales de la información y puedan entregarse con libertad y tranquilidad a su labor”.
Más aún, dijo que “hacen falta más comunicadores comprometidos con su labor cotidiana, entregados en cuerpo y alma a su profesión, sin el temor de ser reprendidos por regímenes autoritarios”.
De Zabludovsky, dijo que es referente obligado para conocer la historia del país; destacó su labor no sólo como conductor del noticiero 24 Horas de Televisa, sino también como un notable cronista, y ejemplificó con su reporteo del terremoto de 1985.
Al recibir la presea, el comunicador agradeció “humildemente” el reconocimiento y ensalzó una idílica Cámara de Diputados. Por ejemplo, afirmó que el “Congreso se ha fortalecido al marcar los cauces legales que permiten mayor intensidad del debate”, hecho que no corresponde con la realidad, pues en la aprobación de leyes cruciales como la laboral, educativa o de telecomunicaciones, ello no se ha dado.
Lo que en realidad ha ocurrido es una “exposición” de ideas, e incluso en ocasiones priistas, panistas y perredistas han optado por dar la espalda a algunos legisladores que los cuestionan desde tribuna.
Jacobo Zabludovsky dijo además que “ningún partido impone su voluntad”. Sin embargo, en las mismas aprobaciones de leyes sí se ha impuesto la voluntad del PRI en alianza con el PAN, o del PRI en alianza con el PRD.
“Esta honorable Cámara ejerce sus facultades constitucionales sin consigna, para llegar a acuerdos emanados del razonamiento conforme a derecho, sin dependencia de ningún otro poder, cuyos límites son observados con deferencia”, siguió el galardonado en su alabanza, olvidando así que las principales reformas constitucionales no fueron elaboradas por legisladores, sino en el seno del llamado Pacto por México y que, al llegar a votarse aquéllas, muchos diputados desconocían su contenido.
El comunicador y reportero también sostuvo que “la cámara es hoy resultado de los avances alcanzados en la vida democrática del país. …fortalece la división de poderes y mantiene el equilibrio indispensable para avanzar en paz hacia mejores condiciones de vida anheladas por todos los mexicanos”.
No obstante, Zabludovsky omitió que en la aprobación de la ley educativa no se consultó en momento alguno a los maestros, motivo por el cual hoy al menos dos estados, Guerrero y Michoacán, viven enfrentamientos y manifestaciones de descontento del magisterio.
El galardonado estuvo acompañado de su familia, de su amigo Francisco Healy hijo, dueño del diario El Universal, donde colabora Zabludovsky, y del propietario de Radio Centro, Marcos Aguilar Vega, en donde tiene un programa radiofónico, favorito del gremio de taxistas.
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