En el marco de la misa solemne en honor a San Luis Rey de Francia, patrono de la ciudad, del estado y de la Arquidiócesis potosina, el arzobispo Jesús Carlos Cabrero Romero lo reconoció como religioso, político, servidor, honesto y recto y como un modelo a seguir para los gobernantes.
Asimismo, pidió a las nuevas autoridades que entraran en funciones atender “los baches” que existen en el estado en todos los aspecto, para de estar forma acercarse a una sociedad que se siente abandonada por sus gobernantes.
Cabrero Romero recalcó que los nuevos gobernantes que tendrá San Luis Potosí en próximos meses tienen que ser verdaderos servidores y sensibles a las necesidades de la sociedad, que vean que está todo lleno de “baches”, y no sólo en el piso, sino en diferentes situaciones humanas y sociales: “tiene que haber políticas más profundas que sean continuadoras unas de otras y no hacer liderazgos politiqueros, sino liderazgos sensibles con un fuerte sentido social”, sentenció.
Cuestionado sobre si la inseguridad que se ha vivido en últimos días es uno de esos “baches”, consideró que es uno de muchos problemas, pero advirtió que el primer bache que tienen que arreglar los gobernantes es el distanciamiento que hay con la ciudadanía, para que todos juntos “le entren” a los problemas que aquejan a la población.
Puntualizó que “los líderes que representamos los diferentes entes sociales que integran San Luis necesitamos acercarnos porque aquí ya no se vale de uno, o todos o nadie, aquí hay que entrar todos juntos y aportar cada quien en su campo”.
Finalmente, sobre el conflicto que existe entre Interapas y la Comisión Estatal del Agua (CEA) por el asunto del agua de la presa El Realito, no emitió una postura a profundidad, pero dijo: “yo creo que todos debemos bajar la conciencia de que las cosas cuando se hacen mejor dignifican a las personas, entonces necesitamos hacer algo todos. Dios no va a venir a suplir lo que no hacemos”, finalizó.
Fuente: Jornada