Jaime Rodríguez Calderón (Galeana, Nuevo León, 1957), conocido como El Bronco, ha hecho público su patrimonio este lunes: 60 yeguas, 200 borregos, 200 gallinas y 80 hectáreas donde cultiva alfalfa. El gobernador electo de Nuevo León, que aplastó al PRI y al PAN en las elecciones del domingo para convertirse en el primer gobernante independiente, ha querido dejar claras las cosas en un país donde muchos políticos suelen dejar el poder con mucho más que cuando llegaron.
Pregunta. ¿Qué le dijo el presidente?
Respuesta. Me felicitó y dijo que está dispuesto a colaborar para que nos vaya bien. Está contento, es algo histórico. Me comentó que me invitará a estar con él cuando se haga oficial el resultado.
P. Le agradeció por la reforma política.
R. Gracias al presidente tenemos hoy la posibilidad de tenercandidatos independientes. Los diputados echaron a perder la reforma porque le pusieron muchas trabas, pero el origen de la iniciativa fue de él.
P. ¿Qué señal ha lanzado Nuevo León a México?
R. Significa que los partidos tendrán que reformarse. Los ciudadanos ya se cansaron de este sistema, que está viejo. Es como la monarquía, que hacía muy estables a los países hasta que los ciudadanos se cansaron de los excesos y la corrupción de los reyes. El ciudadano es más poderoso que cualquier sistema.
P. A usted le toca definir lo que es un independiente en México. ¿Significa ser oposición?
R. No voy a ser opositor a nadie. Quizá los partidos vayan a ser opositores a nosotros, pero lo que voy a hacer es conciliar. Ser independiente significa que puedes hablar con todos, no traes el peso del partido arriba de ti. Puedo recibir las opiniones de todos y podemos hacer un collage de propuestas y respuestas.
P. Pero tiene compromisos con la gente. Llega en un contexto de mucha molestia con el gobierno local de Rodrigo Medina, del PRI.
R. Hay un encabronamiento colectivo por los temas de corrupción. A nadie le gusta que los funcionarios se hagan ricos con tus impuestos. Sí hay un enojo desde la parte alta hasta la parte baja de la sociedad. No estaba pasando eso en México, pero este es un despertar. Es la primavera mexicana que, bendito Dios, yo inicié.
P. ¿Tiene usted similitudes con el presidente Vicente Fox y el año 2000?
R. Hubo en esos años un enojo contra los 75 años del sistema del PRI. Hoy se ha vencido a un sistema que tiene 87 años. Hay condiciones iguales de enojo, pero no me parezco nada a Fox. Nos vestimos igual, pero él se apendejó en el Gobierno. Yo no me voy a apendejar.
P. Usted se forjó a la sombra de Alfonso Martínez Domínguez, un ícono del PRI. ¿En su ADN queda rastro priísta?
R. No sé. Quizá los buenos rastros de aquellos años donde el servicio público era privilegiado. Donde se daba la satisfacción de servirle a la gente. Y se fue perdiendo. Fuimos haciendo clones de la política, mandamos a gente a prepararse fuera del país. Regresaron con ideas reformistas que no daban resultados. Tenemos que regresar al servicio público honesto.
P. ¿Está usted acabando con los poderes fácticos?
R. Hay que romperlos porque han detenido el avance de la sociedad. Esta campaña fue grandiosa porque nos enseñó que cuando el ciudadano se organiza puede vencer todo. Ahí están los resultados.
P. Durante su festejo se escucharon gritos contra la televisión local. ¿Ha acabado usted con los telecandidatos?
R. No voy a utilizar la televisión para promover la soberbia y egolatría del gobernante en turno. Medios de comunicación como Grupo Multimedios y Televisa se sintieron agredidos. Ellos usan mucho a los telecandidatos. La candidata del PRI tuvo una cobertura del 90% en ambas televisiones. A mí no me dieron ni el 1%. Demostré que no es necesario. Se jodió la televisión en el tema del negocio político.
P. ¿Con qué lo compensó?
R. Con las redes sociales. Son lo más impresionante que puedes usar hoy. Ya no dependes de la televisión. Quiero utilizar la tecnología para dar respuesta inmediata desde el Gobierno. Migrar de las costumbres como mítines y aplausos al gobernante a audiencias cibernéticas. Todos los días voy a dedicar dos o tres horas a atender a la gente por las redes.
P. ¿Se puede gobernar Nuevo León sin el respaldo de los industriales?
R. Tenemos el respaldo de una sociedad. Veo a los empresarios contentos conmigo. Al principio había dudas, pero cuando hice la alianza con don Fernando Elizondo se les quitaron. No quiero trastocar la vida de nadie ni afectar las instituciones del Gobierno. Lo que quiero es reformar el sistema, hacerlo más práctico, más sencillo y humano.
P. Usted plantó cara ante la violencia. ¿Considera que la crisis de seguridad que vivió el Estado fue determinante para su triunfo?
R. Sí, incluso fui víctima de la violencia. Tenemos que hacer todo el esfuerzo por combatirla y ser inteligentes de no generar más violencia al hacerlo.
P. ¿Qué opina de legalizar las drogas?
R. No estoy de acuerdo. México no está preparado para ello. Necesitamos educar más a nuestra población. La droga es adictiva. Hay quienes la ven como recreativa, pero esos casos solo se dan en países o ciudades que están educados.
P. En el Distrito Federal no hay independientes, ¿por qué?
R. Porque nadie se atrevió. Pero en otras ciudades sí. Enrique Alfaro [alcalde electo en Guadalajara, Jalisco] y yo somos amigos. Quizá podamos ir juntos a buscar una posibilidad de ir generando un cambio en el país.
Fuente: El País