Por su probable responsabilidad en el asesinato de su esposa, Álvaro, conocido como “El Caníbal de La Resurrección”, estará en prisión preventiva.
El 19 de junio, el sujeto hirió con un picahielo y golpeó la cabeza de Monserrat, de 38 años, hasta dejarla inconsciente porque se negó a tener relaciones sexuales.
Al siguiente día, con la ayuda del equipo canófilo de la policía municipal, los familiares encontraron restos de la mujer en una barranca de la junta auxiliar de La Resurrección.
Según el testimonio de una hija de la víctima, el probable asesino confesó su crimen y el lugar en donde aventó el cuerpo, para que lo rescataran.
Versiones extraoficiales aseguran que el sujeto, de 38 años, abrió la cabeza de su esposa para comerse parte de su cerebro en tacos.
Además, cuando la policía lo detuvo en el interior de su casa, encontró un cráneo y restos óseos en una bolsa, que quizá pertenece a su pareja sentimental, en un altar a la “Santa Muerte”.
El probable homicida manifestó que “escuchaba voces arriba, en la azotea de su casa”. También dijo que su víctima tenía la piel gruesa porque dobló el arma punzocortante que le enterró.
El pasado 4 de junio, para pedir que las autoridades agilicen la búsqueda, los familiares se manifestaron afuera de las oficinas de la Fiscalía Estatal.
Durante la protesta, expresaron que desconocen el paradero de la cabeza de Monse, pidieron que “El Caníbal de La Resurrección” permanezca en prisión y que se le vincule por el delito de feminicidio.
Tras el violento feminicidio, las cinco hijas de Montserrat exigieron justicia por el asesinato de su mamá, además colocaron un altar lleno de flores y velas para honrar su memoria, además aseguran, aún no se les ha hecho entrega del cuerpo para poder darle cristiana sepultura,
Las cinco jóvenes denunciaron que las autoridades aseguraron que se les hará entrega del cuerpo dentro de 15 a 20 días, pero a ellas les resulta exagerado.
Cabe mencionar que no es lo único que piden, ellas también exigen que Álvaro, ahora conocido como “El Caníbal de La Resurrección”, pague con la pena máxima por el asesinato de Monserrat.
El Gráfico