Una de las hipótesis que manejó la extinta Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal (PGJDF) en el homicidio del conductor y comediante Francisco ‘Paco Stanley fue una supuesta deuda con el narcotraficante Luis Ignacio Amezcua Contreras.
Para iniciar su investigación con esta teoría tomó a consideración la declaración de Luis Valencia, cocinero del capo, que afirmó que escuchó a su jefe ordenar a Erasmo Pérez Garnica, el ‘Cholo’, el asesinato del popular presentador por deberle una suma millonaria.
Samuel del Villar, ex procurador capitalino, sostuvo que el empleado del narco también vio que en la reunión donde se planeó el crimen asistieron Mario Bezares y Paola Durante, compañeros de Stanley.
Las autoridades afirmaron que la edecán sirvió de enlace entre el capo y el sicario, mientras que Bezares tenía como función retrasar todo lo posible la ida de Stanley del sitio donde se cometería el asesinato.
La versión de Valencia perdió pesó al retractarse de sus dichos y acusó a las autoridades de torturarlo para inculpar a los detenidos. Todos los acusados en el caso fueron declarados inocentes por falta de pruebas después de estar presos por más de un año.