Matrimonios gay, abortos, asesinatos, secuestros, entre otros actos aberrantes, están provocando “la ira de Dios”, advierte el Vicario de Catedral en Valles
Ante el exorcismo que realizaron en la Catedral metropolitana, el Cardenal emérito de Guadalajara, Juan Sandoval Iñiguez, el arzobispo de San Luis Potosí, Monseñor Carlos Cabrero y varios sacerdotes expertos en la materia el sacerdote Rodrigo Vega Conde, vicario del Sagrario Catedral en Ciudad Valles, señaló que es algo bueno, “México está lleno de maldad, infestado de violencia y hace falta acercarse a Dios”.
Señaló que el aborto es un crimen que está provocando “la ira de Dios”, que sí es necesario hacer algo similar, pero esa respuesta la tiene el obispo de la Diócesis de Valles, Roberto Octavio Balmori Cinta.
Dijo que los abortos son niños que quieren llegar al mundo y por las decisiones de las personas no nacen y éste fue el principal motivo del “Magno Exorcismo”, realizado en la Catedral del Estado a puerta cerrada.
Además la apertura para que se den los matrimonios entre parejas del mismo sexo, asesinatos, secuestros, entre otros actos aberrantes, “no tienen muy contento a Dios”.
“Este país está infestado de espíritus, infestado de violencia y de maldad”, como dijo San Agustín “cuanto más nos vaciamos de Dios, más se ocupa el Diablo”, es decir que si nos alejamos del bien, el mal nos persigue, expresó.
“Nos hemos vaciado mucho de Dios y uno de los principales corajes del Diablo es que le tiene mucho miedo a la Virgen María y cuando ella se apareció en México él fue expulsado y quiere regresar a tomar los corazones, entonces hay que orar más y reflexionar”, apuntó.
El hombre debe regresar a Dios, porque lo único que tiene al alejarse de él es maldad y es necesario detenerla, “en el hombre no hay conciencia, nos hemos dejado arrastrar por el pecado, por la seducción, por muchas cosas negativas, Dios nos ama, es misericordioso y Dios espera nuestro regreso como al hijo pródigo”, aseguró.
Así como Jesucristo dijo, “me levantaré y volveré a mi padre, así se tiene que levantar nuestro país, dejar atrás tanta maldad y regresar a Dios, vivir en una sociedad de paz, de amor, de armonía y sobre todo de hermandad”, comentó.
Indicó que es importante que todos los sacerdotes promuevan la oración en familia, en la Iglesia y entre los vecinos, porque la oración tiene mucho poder.
Agregó que si se hiciera un exorcismo similar en la Huasteca, sería decisión del Obispo, él es el único que podría responder si hará o no algo en la ciudad.
“Yo como sacerdote invitaría a toda la gente a orar, a acercarnos más a Dios, hacer una buena confesión y tratar de llevar una vida en la gracia del Señor”, concluyó.
Fuente: Pulso
