Hoy, las redes sociales se encienden con la emotiva conmemoración del asesinato del hijo mayor de Joaquín “El Chapo” Guzmán, Édgar Guzmán López, hace 16 años. En una tradición que se repite anualmente, El Chapo ha ordenado adornar el cenotafio que marca el lugar de este trágico evento con un impresionante arreglo floral.
Ubicado en el estacionamiento del centro comercial del Desarrollo Urbano Tres Ríos en Culiacán, este monumento ha sido transformado con una profusión de flores blancas y rojas, entre las que destacan las letras “E” y “G”, las iniciales del hijo del Chapo. Este detalle resalta sobre un arco de flores, junto a una cruz blanca decorada con elementos rojos. En la base, diversas flores rojas reposan junto a un conmovedor mensaje: “De tu papá Guzmán Loera”.
El 8 de mayo de 2008, Édgar Guzmán fue víctima de un trágico tiroteo en este mismo lugar, presuntamente a manos de miembros del grupo criminal de los Beltrán Leyva. Este incidente ha sido vinculado con la rivalidad entre esta organización criminal y el Cártel de Sinaloa, tras la captura de Alfredo Beltrán Leyva, también conocido como El Mochomo.
Esta ceremonia anual, que busca honrar la memoria de su hijo, refleja la sensibilidad y el profundo apego de El Chapo a su familia, a pesar de su encarcelamiento en Estados Unidos. La conmovedora imagen del cenotafio adornado con flores blancas y rojas es un recordatorio de la perdurable presencia del Chapo en la cultura popular y en la memoria colectiva.
