Entre el malabarismo profesional y el mimo del humor; el olor a león enjaulado se combina con los colores del rostro de Paquín Junior el payaso. Son los elementos de esa cultura circense que no muere y que desde el siglo antepasado, en 1888, promueven los hermanos Atayde con su gran espectáculo que en su más reciente presentación llegó a San Luis Potosí.
Este circo mexicano de fama mundial que nació en Mazatlán en 1888, pasó en sus inicios por peripecias políticas que lo hicieron ausentarse 20 años del país. Sucedió el año 1910, en las postrimerías del régimen porfirista, cuando en su carpa se organizó un mitin antirreeleccionista encabezado por Francisco I. Madero precisamente contra el general Porfirio Díaz. Y claro, eso le hizo ganarse la animadversión del régimen.
Pero fue hasta el año 1926 cuando cruzó la frontera con Guatemala para adentrarse en tierras centroamericanas y sudamericanas, de donde regresó al país 20 años después, en 1946.
El Circo Atayde Hermanos comenzó a presentarse en nuestra ciudad para hacernos sentir parte de ese mundo mágico del circo, el espectáculo más imponente de la carpa y la acrobacia en nuestro país.
Es de caravana en caravana y con un estilo de vida aparte, como el Circo Atayde Hermanos llegó al tradicional terreno de la avenida Diagonal Sur de la colonia El Paseo, frente a Soriana.
Verlo es una gama de sensaciones, colores y movimientos; es una mezcla de culturas y tradiciones con artistas argentinos, venezolanos, rusos, colombianos, y por supuesto mexicanos.
Es apreciar los extraordinarios actos con los elefantes de la India que hacen giros y pirámides; es contemplar los hermosos caballos en libertad y danza como uno de los más sublimes actos del circo tradicional.
El payaso Paquín Jr., con el mismo flequillo que mueve los hilos de la función con su cuota de humor para que todo se vuelva excelso, grandioso. Interactúa con el público, divierte, entretiene y emociona.
El plattó se ilumina con una hermosa y delicada mujer que flexiona, hace movimientos inesperados, diríamos imposibles si no es porque los ejecuta con gran fineza. Es la bella Scarlett la contorsionista, orgullo de México que forma parte de la tercera generación de familias de circo en nuestro país, con un gran futuro para ser estrella mundial.
En el firmamento se escribe con letras de plata el nombre de Marisa Sáenz, la princesa del trapecio y la acrobacia aérea. Es originaria de Argentina, pero ciudadana del mundo.
Así se vive y revive la infancia perdida. En un circo donde aplaudimos y no dejamos de agradecer. De recordar. Está en San Luis Potosí frente a Soriana El Paseo.
Es el de siempre, es el Circo Atayde Hermanos. ¡Vamos, vamos, vamos!
http://www.oem.com.mx/elsoldesanluis/notas/n2988081.htm