En el corazón del municipio de Soledad de Graciano Sánchez, el comercio ambulante no solo aporta sabor y color a las calles, sino que también representa una fuente vital de ingresos para muchas familias. Con al menos 20 puestos dedicados a la venta de comida preparada, frutas y verduras en la plaza principal, este tipo de comercio se ha convertido en una tradición que refleja la hospitalidad y calidez de su gente.
Cómo obtener un permiso para vender en la calle
Para aquellos interesados en unirse a este dinámico sector, el primer paso es obtener un permiso otorgado por la Dirección de Comercio Municipal. Este trámite requiere presentar una solicitud formal, especificando los productos a vender y la ubicación deseada. Los permisos son emitidos principalmente para áreas designadas y deben renovarse periódicamente.
El costo del permiso varía según la ubicación y el tipo de productos, y todos los comerciantes deben cumplir con las normativas de salud y seguridad del municipio, asegurando que los productos ofrecidos sean seguros para el público.
Historias de éxito: Cristina Florentino e Irma Oviedo
Cristina Florentino e Irma Oviedo son ejemplos de cómo el comercio ambulante puede ser una fuente estable de ingresos y una forma de conexión con la comunidad. Con más de dos décadas dedicadas a la venta de tamales y verduras, estas mujeres han construido relaciones sólidas con sus clientes, quienes valoran no solo la calidad de sus productos, sino también la atención personalizada y amable que brindan.
Cristina comparte que “Empecé a vender aquí porque siempre me ha encantado cocinar y compartir mi comida con los demás. La gente de Soledad es increíblemente amable, y eso hace que cada día de trabajo sea una experiencia gratificante.”
Por su parte, Irma añade: “Vender en la plaza principal es más que un trabajo; es una oportunidad de ser parte de la vida de las personas que pasan por aquí cada día. Ver a los clientes volver y convertirse en amigos es lo que hace que todo valga la pena.”
Un municipio de oportunidades
Soledad de Graciano Sánchez sigue siendo un lugar donde las oportunidades florecen para quienes buscan emprender en el comercio ambulante. La combinación de una gestión organizada por parte de las autoridades y el calor humano de sus habitantes crea un ambiente ideal para que los pequeños negocios prosperen.
En un entorno donde el comercio es más que una simple transacción, sino una celebración de la comunidad y la tradición, este municipio se destaca como un ejemplo de cómo el esfuerzo y la dedicación pueden transformar los sueños en realidades tangibles.
