En un mundo cada vez más preocupado por la procedencia de los materiales que integran los productos que consumen, lossmartphones o teléfonos inteligentes parecen haber quedado olvidados. Sin embargo, una iniciativa holandesa empezó a preocuparse por la procedencia de los minerales usados en los dispositivos móviles de consumo masivo.
Descrito como “Un smartphone serio y cool que pone los valores sociales primero”, el Fairphone es una iniciativa originada en Holanda, la cual busca la creación de un teléfono celular que promete una combinación de diseño novedoso con la responsabilidad social en lo referente al origen de sus materiales y a la mano de obra.
La historia de esta startup – negocio con una historia de funcionamiento limitado- comenzó hace unos meses en los Países Bajos con la preocupación por el origen de los minerales usados en los gadgets de consumo masivo, lo que derivó en una empresa de nueva creación de hardware que está a punto de lanzar su primer producto al mercado, mediante un sitio de financiamiento en masa.
De esta manera, Fairphone abrió a los usuarios de la red la posibilidad de hacerse de un teléfono totalmente ético desarrollado especialmente para todos aquellos preocupados con este tema.
La compañía aseguró que necesitan unas cinco mil preordenes para empezar la producción de este móvil con un valor de 325 euros (5 mil 270 pesos, aproximadamente), una pantalla de 4.3 pulgadas y un procesador de cuatro núcleos.
Aunque no se ha especificado qué compañía lo fabricaría, se dieron a conocer datos que indican que cuenta una cámara principal de 8 megapíxeles y una frontal de 1.3 MP, así como la posibilidad de utilizar dos SIM, para los usuarios que cuenten con más de una línea telefónica.
Sin embargo, no basta la buena voluntad para despertar conciencias y, en este caso, el éxito no ha sido el esperado. Actualmente se han vendido dos mil 383 unidades de Fairphone, lo que representa el 47% de los cinco mil necesarios para que se de luz verde a su producción, lo que ha llevado a ciertas modificaciones en la estrategia de promoción.
De acuerdo con el sitio de tecnología TechCrunch, en un inicio las preventas sólo estaban habilitadas para las 16 mil personas que se inscribieron en Holanda. No obstante, la demanda fue tan poca, que la compañía tuvo que habilitar la convocatoria para el resto de Europa. A pesar de todo, el precio sigue siendo uno de los obstáculos más grandes para muchos.
El smartphone no promete ser lo último en innovación tecnológica, pero sí quiere cambiar el modelo tradicional de los fabricantes de este tipo de dispositivos. De acuerdo con el sitio de la organización, se verifica personalmente la procedencia de los minerales de cada componente, así como de la gente involucrada con el proceso y que todo esté en regla con los estándares ecológicos y sociales.
Durante muchos años, uno de los aspectos olvidados en esta industria es la procedencia de los minerales usados para fabricar los teléfonos inteligentes, así como el trató a los trabajadores que los elaboran. Las prácticas en las fábricas de Foxconn (proveedora de marcas como Apple, Sony y Microsoft) han puesto en evidencia el mundo de explotación laboral que existe detrás de un gadget, pero pocos han hecho algo al respecto.
“Esta es nuestra visión: por crear un smartphone alternativo y siendo abiertos sobre la forma de fabricación de electrónicos (y de donde vienen la materia prima interna) podemos entender toda la cadena de producción, tomar medidas y movernos hacía un cambio sistémico”, dice Fairphone en su sitio.