Las secretarías de la Defensa Nacional (Sedena) y de Marina (Semar), así como la Fiscalía General de la República (FGR) y el Centro Nacional de Inteligencia (CNI), han desacatado, “parcial o totalmente”, la instrucción del Presidente Andrés Manuel López Obrador de abrir la totalidad de sus archivos para el debido esclarecimiento de la guerra sucia en el periodo 1965-1990, denunció hoy la Comisión de la Verdad creada con ese propósito.
Los miembros del Mecanismo para el Acceso a la Verdad y el Esclarecimiento Histórico de las violaciones graves a los derechos humanos cometidas de 1965 a 1990 (MEH), Eugenia Allier Montaño, Abel Barrera Hernández, David Fernández Dávalos y Carlos A. Pérez Ricart, recordaron que el Presidente López Obrador emitió un acuerdo en 2019 para la apertura total de los archivos del Gobierno para el esclarecimiento del periodo de la guerra sucia y enviarlos al Archivo General de la Nación (AGN).
“Este acuerdo ordenó a todas las oficinas de gobierno transferir al AGN ‘la totalidad de los documentos históricos que posean y que se encuentren relacionados con violaciones de derechos humanos y persecuciones políticas vinculadas con movimientos políticos y sociales, así como con actos de corrupción’. Esta instrucción ha sido incumplida parcial o totalmente por la Sedena, la Secretaría de Marina, la Fiscalía General de la República y el CNI”, subraya el pronunciamiento del MEH.
El MEH pone énfasis en el incumplimiento del CNI, encabezado por el General Audomaro Martínez Zapata —amigo del Presidente López Obrador—, quien tiene todos los archivos del Centro de Investigación y Seguridad Nacional (Cisen) y que no los ha entregado.
“Hasta el momento, el único expediente de CNI disponible para su consulta en AGN es el relativo al homicidio del periodista Manuel Buendía en 1984”.
Según los comisionados, el Mecanismo del que forman parte “ha experimentado serias dificultades para el acceso a la consulta irrestricta de documentación histórica proveniente de agencias encargadas de labores de seguridad, inteligencia, de las fuerzas armadas y de las policías” y, a 22 meses de su creación, no ha tenido acceso a la totalidad de los archivos del extinto Cisen, hoy CNI, “material crucial para la investigación de las violaciones cometidas en este periodo” de 1956 a 1990.
Por ello, el MEH demanda públicamente la garantía de transferencia total y de acceso de archivos y expedientes del CNI al AGN que incluya los faltantes de la Dirección Federal de Seguridad (1947-1985), los de la Dirección General de Investigación y Seguridad Nacional (DGISEN, 1985-1989) y los del CISEN (1989-1993) que el CNI debe tener aún bajo su poder y que son cruciales para el cumplimiento del mandato del MEH.
“Exigimos el acceso, a la brevedad, a los depósitos en bóveda tanto del CNI como del AGN. El cumplimiento por parte del CNI de lo previsto por la LGA (Ley General de Archivos) sobre la transferencia de toda la documentación al AGN que haya cumplido 30 años desde su fecha de producción, es decir, la generada hasta 1993. Preocupa especialmente que no esté disponible para su consulta aquella relacionada con violaciones a derechos humanos cuya consulta está garantizada por la LGA y la Ley General de Transparencia y Acceso a la Información Pública. Para 2020 debería haberse completado la transferencia total de documentos producidos hasta 1990”.
Los comisionados responsables del esclarecimiento del periodo de la guerra sucia demandan también el cumplimiento del decreto presidencial del 6 de octubre de 2021 por el que se crea la COVEHJ y que autoriza a su personal a acceder a todos los documentos históricos de la administración pública necesarios para realizar su investigación.
Añade el pronunciamiento: “Para comenzar a cumplir de manera cabal con el mandato presidencial llamamos enérgicamente a que el CNI y el AGN permitan el acceso a sus depósitos en bóveda para consulta y digitalización ‘sin ningún límite’ al personal del Mecanismo de Esclarecimiento Histórico, que está facultado para ello por orden presidencial”.
Y sentencia: “Los archivos son fundamentales para la investigación de ese pasado en el que están las claves que nos permiten entender y reinterpretar las violencias del presente. Sin acceso a archivos no hay verdad”.
Sin Embargo