En la cárcel, Elba Esther Gordillo, la mujer acostumbrada a lujos, no ha solicitado ningún tipo de beneficio que no tenga relación con su salud. A excepción de su traslado a un hospital privado para someterse a exámenes, se ha mantenido en un bajo perfil. Ni siquiera ha solicitado permiso para que le sea llevada una televisión, a la cual podría acceder si así lo solicita, según las autoridades penitenciarias consultadas.
La ex líder magisterial no convive con otras internas y permanece en una pequeña habitación de la Torre Médica de Tepepan, no en una celda, donde sólo es vista por su médico particular, los doctores de la institución y algunas enfermeras.
Incluso ni el personal que reparte los alimentos entre los enfermos puede verla, porque su familia le manda a diario sus tres comidas, elaboradas a base de carnes blancas, verduras y agua especial, debido a las 10 enfermedades que padece.
Distracciones
La maestra Elba Esther se mantiene en su habitación, donde lee y dibuja, y gran parte del día está acostada, sin salir a otras áreas. En su estancia sólo tiene una cama individual y un sillón.
“Lee, lee mucho, eso es lo que hace, además de dibujar, por lo que tiene un cuaderno y lápices de colores. Le gusta hacer flores, jarrones”.
Sobre cultura romana son algunos de los libros que le gusta leer a la ex dirigente magisterial.
De acuerdo con las fuentes, la atención médica dada a Gordillo es “a través del Programa de Servicios Médicos y Medicamentos Gratuitos, [que está dirigido a] los residentes del Distrito Federal que carecen de seguridad social laboral”.
Según una respuesta de acceso a la información, la ex líder sindical ha sido trasladada sólo dos veces al exterior, una a Tepepan y otra a un hospital privado. El transporte utilizado fue el determinado por la Subsecretaría del Sistema Penitenciario.
La Secretaría de Salud, en respuesta a una solicitud de acceso a la información, indicó que los resultados de los estudios realizados a Elba Esther Gordillo en un hospital privado —el Ángeles del Pedregal— en abril pasado, así como el costo de los mismos, es información clasificada como datos personales, y sólo el titular de dicha información o su representante legal, mediante poder notariado, podrán tener acceso a ellos.
La ex dirigente del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) fue trasladada de Toluca a la ciudad de México el pasado 26 de febrero, al ser detenida y acusada de lavado de dinero y delincuencia organizada.
Debido a 10 padecimientos que presenta, hace algunas semanas se le practicó una prueba de esfuerzo para diagnosticar si padece de una isquemia miocardica.
Con 68 años de edad, Gordillo Morales tiene una serie de problemas de salud, entre ellos hepatitis viral tipo C, hipertensión arterial sistemática, secundaria a la insuficiencia renal moderada, así como dos aneurismas saculares en ambas arterias cerebrales medias.
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