Ahora, seis meses después, acudió por su refuerzo de AstraZeneca y con ello recibió 200 pesos de apoyo que está entregando el ayuntamiento de este lugar para su traslado en taxi o camión desde una de las más alejadas comisarías con que cuenta este municipio, ubicado en el oriente del estado.
María Paulina Cemé Poot, de 44 años, vive en la comisaría de Popolnah, que es una de las más alejadas de la ciudad de Tizimín, ya que se encuentra a 86 kilómetros de la ciudad y colinda con municipios del vecino estado de Quintana Roo.
Ella y su esposo, Jacinto Náh, estuvieron en el centro de salud de Tizimín y dijeron sentirse bien y “a gusto con la vacuna, porque así nos cuidamos para que no nos agarre esa enfermedad”. Sin embargo, expresaron que no sabían si acudir o no porque viven muy lejos y no tenían dinero para el taxi.
Ambos se animaron al saber que la comuna tizimileña les pagaría el traslado y fue como aprovecharon el inicio de la semana, el lunes pasado, para vacunarse. Tras haberse puesto la dosis, recibieron 400 pesos; 200 por cada uno.
Él es jornalero: siembra maíz y algunas hortalizas para sostener a su esposa y a su madre, María Teresa, de 76 años.
Cemé Poot dice que su esposo ya tuvo “gripa, estornudos y dolor de cabeza”, pero los síntomas se le quitaron a los tres días, por lo que no saben si fue o no Covid-19, pues en la comisaría no se hacen pruebas ni hay doctor todos los días.
La mujer está dedicada a cocinar y prácticamente no sale de su modesta vivienda, ya que cuando su esposo regresa de la milpa “la comida debe estar lista, [pues] llega cansado y con hambre”, aseguró.
Muchas familias en el oriente, sur y hasta centro del estado de Yucatán aún no reciben las dosis completas contra el coronavirus a causa de varios factores; entre ellos, el traslado, no poder dejar el trabajo, enfermedad o hasta porque creen que la vacuna no es necesaria.
Al igual que María Paulina, decenas de personas que por falta de vehículo, o bien, por vivir en comisarías o poblados apartados de la cabecera municipal, no se habían vacunado, ahora lo están haciendo porque al menos tienen el dinero para el tras- lado o para la comida de un día, si es que deben dejar su trabajo durante 24 horas para ir a aplicarse el biológico.
El alcalde de Tizimín, el panista Pedro Couoh Suaste reveló a EL UNIVERSAL que la entrega de los 200 pesos no es “ni un premio, ni una dádiva”, es una ayuda para quienes viven lejos de la ciudad de Tizimín, para que con ese dinero puedan viajar para obtener su vacuna.
El edil manifestó que Tizimín, de origen ganadero y ubicado en el oriente del estado, es el que tiene mayor extensión territorial de los 106 municipios de Yucatán y más comisarías, con 86.
Tizimín, Yuc.— Ella es ama de casa y desde agosto pasado le pusieron la dosis única de CanSino contra el Covid-19.
Ahora, seis meses después, acudió por su refuerzo de AstraZeneca y con ello recibió 200 pesos de apoyo que está entregando el ayuntamiento de este lugar para su traslado en taxi o camión desde una de las más alejadas comisarías con que cuenta este municipio, ubicado en el oriente del estado.
María Paulina Cemé Poot, de 44 años, vive en la comisaría de Popolnah, que es una de las más alejadas de la ciudad de Tizimín, ya que se encuentra a 86 kilómetros de la ciudad y colinda con municipios del vecino estado de Quintana Roo.
Ella y su esposo, Jacinto Náh, estuvieron en el centro de salud de Tizimín y dijeron sentirse bien y “a gusto con la vacuna, porque así nos cuidamos para que no nos agarre esa enfermedad”. Sin embargo, expresaron que no sabían si acudir o no porque viven muy lejos y no tenían dinero para el taxi.
Ambos se animaron al saber que la comuna tizimileña les pagaría el traslado y fue como aprovecharon el inicio de la semana, el lunes pasado, para vacunarse. Tras haberse puesto la dosis, recibieron 400 pesos; 200 por cada uno.
María Paulina Cemé Poot es ama de casa y desde agosto pasado recibió la dosis única de CanSino contra el Covid-19.
Él es jornalero: siembra maíz y algunas hortalizas para sostener a su esposa y a su madre, María Teresa, de 76 años.
Cemé Poot dice que su esposo ya tuvo “gripa, estornudos y dolor de cabeza”, pero los síntomas se le quitaron a los tres días, por lo que no saben si fue o no Covid-19, pues en la comisaría no se hacen pruebas ni hay doctor todos los días.
La mujer está dedicada a cocinar y prácticamente no sale de su modesta vivienda, ya que cuando su esposo regresa de la milpa “la comida debe estar lista, [pues] llega cansado y con hambre”, aseguró.
Muchas familias en el oriente, sur y hasta centro del estado de Yucatán aún no reciben las dosis completas contra el coronavirus a causa de varios factores; entre ellos, el traslado, no poder dejar el trabajo, enfermedad o hasta porque creen que la vacuna no es necesaria.
Al igual que María Paulina, decenas de personas que por falta de vehículo, o bien, por vivir en comisarías o poblados apartados de la cabecera municipal, no se habían vacunado, ahora lo están haciendo porque al menos tienen el dinero para el tras- lado o para la comida de un día, si es que deben dejar su trabajo durante 24 horas para ir a aplicarse el biológico.
El alcalde de Tizimín, el panista Pedro Couoh Suaste reveló a EL UNIVERSAL que la entrega de los 200 pesos no es “ni un premio, ni una dádiva”, es una ayuda para quienes viven lejos de la ciudad de Tizimín, para que con ese dinero puedan viajar para obtener su vacuna.
El edil manifestó que Tizimín, de origen ganadero y ubicado en el oriente del estado, es el que tiene mayor extensión territorial de los 106 municipios de Yucatán y más comisarías, con 86.
“Nos dimos cuenta de que había gente que por no perder lo que gana en un día de trabajo, o por no tener para el traslado, seguía sin vacunarse”.
Por eso decidimos dar el apoyo, porque queremos que toda la población quede inmunizada contra el Covid-19.
En paralelo, el ayuntamiento de Tizimín mantiene una campaña permanente para convencer a su población de que la línea entre la vida y la muerte a causa del Covid-19 depende de la vacuna, por lo que es necesario acudir a aplicársela.
Tizimín es el único ayuntamiento de Yucatán que está pagando 200 pesos a cada persona que acepta la dosis.
Se estimó que serán entre 280 y 300 personas las que podrían recibir el beneficio de la vacuna y el dinero gracias a la campaña para ampliar la cobertura y protección de la población contra el Covid-19.
El Universal